La selección de sospechosos de terrorismo por su rostro o color de piel en los controles de los aeropuertos -algo que genera quejas de minorías que denuncian ser sistemáticamente seleccionadas- no es sólo moralmente reprochable sino ineficaz, afirma un estudio científico.
“Cualquier forma de selección sesgada pasa rápidamente a ser menos eficaz que una selección al azar”, dijo el estadístico estadounidense William Press, profesor de la Universidad de Texas (sur).
Elegir a alguien por su cara o su color de piel “no funciona debido a que siempre se termina revisando a la misma gente inocente una y otra vez, por la simple razón de que pertenecen al grupo escogido”, explicó Press, cuyo estudio se publicó el miércoles en la revista Significance, de la Sociedad Real Británica de Estadísticas.
Estudios anteriores ya habían demostrado que cualquier aparente aumento del éxito debido a la selección racial de personas se debe en realidad al aumento de la investigación: si se pone a más policías y recursos a controlar a un grupo específico, necesariamente se encontrarán más delincuentes.
“Es simplemente mejor proceder con muestras al azar, lo que asegura que cualquiera que se presente al control de un aeropuerto tenga la misma probabilidad de ser inspeccionado”, destacó.
“Este método, fácil de poner en marcha, es asombrosamente eficaz, ofrece un sólido seguro contra los prejuicios y es disuasivo”, insistió Press, que da clases de estadística en cursos univesitarios.
La revisión de pasajeros se hizo más engorrosa y severa en los aeropuertos de Estados Unidos -y del mundo en general- luego de los ataques del 11 de setiembre de 2001.