Codelco informó este jueves que la Corema de la Región de Antofagasta aprobó la Declaración de Impacto Ambiental (DIA) “Mina Chuquicamata Subterránea”, que ejecuta la vicepresidencia de Proyectos de la cuprífera estatal, en coordinación con División Codelco Norte.
La Corporación Nacional del Cobre ingresó la Declaración de Impacto Ambiental por el referido proyecto el 15 de enero del presente año.
Según comunicó la minera, el proyecto Mina Chuquicamata Subterránea es una de las iniciativas estructurales de Codelco y consiste básicamente en un cambio del método de extracción de mineral del yacimiento Chuquicamata, desde rajo abierto a una explotación subterránea, que permitirá beneficiar parte importante de los recursos que quedarán bajo la actual mina a cielo abierto, la que dejará de ser rentable a fines de la presente década.
“De esta manera se da continuidad en el largo plazo al giro del negocio, dado que bajo el rajo se han cuantificado cerca de mil 700 millones de toneladas en reservas de mineral de cobre (ley 0,7%) y molibdeno (ley 499 ppm), que representan más de 60% de lo explotado en los últimos 90 años”, destacó la empresa.
Con una inversión total estimada de US$ 2 mil millones, el proyecto tendrá una duración completa aproximada de 50 años, contados desde el inicio de la construcción hasta el término de la operación. La extracción del mineral desde el yacimiento Chuquicamata, definida para la etapa de operación, se efectuará por un período estimado de 42 años, precedida por una fase de construcción y puesta en marcha de cerca de 8 años y de un escalamiento productivo (ramp up) de 9 años, aproximadamente.
De acuerdo a lo planificado, la Mina Chuquicamata Subterránea tendrá una tasa de producción en régimen de 140 mil toneladas de mineral por día (tpd), lo que significará una producción máxima de 340 mil toneladas de cobre fino en concentrado y más de 18 mil toneladas de molibdeno fino al año.
El vicepresidente de Proyectos (I) y gerente del proyecto Mina Chuquicamata Subterránea, Sergio Fuentes, valoró la aprobación de la DIA y afirmó que su ejecución “aportará al mejoramiento de la calidad de vida de los habitantes de la comuna de Calama, declarada el año 2009 zona saturada por material particulado respirable. El cambio del método de explotación desde rajo a minería subterránea disminuirá aproximadamente un 97% de las emisiones asociadas a las operaciones mineras del yacimiento Chuquicamata”.
Por otro lado, el ejecutivo agregó que “este proyecto estructural representa una oportunidad enorme de cambio y evolución de nuestra compañía, en términos de gestión y prácticas de trabajo”.
En forma adicional a su aporte en la mejora de la calidad del aire, el proyecto Mina Chuquicamata Subterránea ha desarrollado su ingeniería bajo el criterio de diseño de que tanto las instalaciones superficiales como las de interior mina, se proyecten sin interferir los acuíferos de la zona.