La única gestión válida para llegar a algún acuerdo con los comuneros mapuche en huelga de hambre hace 73 días, es la que está llevando adelante el arzobispo de Concepción, Ricardo Ezzati.

Así lo manifestaron el Frente Amplio en Solidaridad con el Pueblo Mapuche y la Coordinadora de Organizaciones Autónomas Mapuche de Santiago, COOAMS, en conjunto a representantes del mundo social, político, eclesiástico, sindical, estudiantil y cultural, junto con expresar su rechazo pleno a la mesa de diálogo establecida por el Presidente Sebastián Piñera.

En relación a la huelga de hambre de los comuneros, que podría tener un desenlace fatal, el vocero de la COOAMS, Manuel Chocori, dijo que ellos no depondrán la huelga.

A pesar de ello, llamó a las comunidades mapuche, a las organizaciones humanitarias y sociales, y a la opinión pública a mantenerse alerta ante la grave situación de salud que enfrentan los ayunantes.

Dijo que han experimentado un irreparable deterioro físico y sicológico, descompensaciones renales y cardiacas, y una baja de peso superior a los 25 kilos. Chocori dijo que eso significa el inicio de una fase crítica que los pone en riesgo vital.

Por su parte, el presidente de la Federación de Estudiantes de la Universidad de Chile, FECH, Julio Sarmiento, indicó que los universitarios han suscrito las demandas del pueblo mapuche como un tema de justicia, y que si llega a morir uno de los comuneros en huelga de hambre, podría producirse un conflicto social de proporciones.

Y refiriéndose al cómo podría llegar a su fin el ayuno de los comuneros, Manuel Chocori señaló que se debe decretar la no aplicación en su contra de la Ley Antiterrorista y el fin al doble procesamiento por la justicia civil y militar.