Los hijos de Sakineh Mohammadi-Ashtiani, condenada a la lapidación en un caso de adulterio, Sajjad y Saeideh Ghaderzadeh, lanzan este viernes en el diario francés Le Figaro un llamado a favor de su madre, tras la difusión de una entrevista televisada en Irán.
“¿Cuántas entrevistas falsas habrá?” se preguntan. “¿Por qué y cuántas entrevistas, y cuál es la razón?” se preguntan, agregando: “¿Por qué no nos permiten estar al lado de nuestra madre durante la entrevista?”
Ambos se interrogan por el objetivo de las entrevistas falsas. ¿Quieren provocar (las autoridades de Teherán) a sus partidarios contra nosotros, de modo que seamos el blanco de sus ataques?”.
El miércoles, en una entrevista televisada, una iraní velada, que se presentó como Sakineh Mohammadi-Ashtiani y cuya condena a la lapidación por un caso de adulterio ha desencadenado numerosas condenas, negó en una entrevista televisada que la hayan golpeado o torturada en prisión.
En la entrevista, transmitida por la noche, la mujer cuya cabeza estaba cubierta por un chador, negó haber sido golpeada tras la publicación, el 28 de agosto, en el periódico británico The Times, de la foto de una mujer sin velo que se supone representaba a Sakineh.
La foto era falsa y el periódico tuvo que disculparse.
Sakineh Mohammadi-Ashtiani, una madre de familia de 43 años, fue condenada en 2006 a 10 años de prisión por su implicación en el asesinato de su marido, junto con uno de sus amantes, y a la lapidación a muerte por varios adulterios, según las autoridades iraníes.
La “suspensión” de la pena de muerte fue anunciada oficialmente el 9 de julio por el poder judicial iraní, y es desde entonces reafirmada periódicamente por diversos dirigentes iraníes, públicamente o en privado, en respuesta a varias iniciativas diplomáticas lanzadas para pedir clemencia.