De forma increíble, la inglesa Michelle Philpots (47) se despierta hace 16 años pensando que es 1994 y que vive la vida sin ataduras en su condición de soltera. Sin embargo, la realidad dista mucho de eso ya que el calendario marca 2010 y su libreta de matrimonio asegura por ley que … ¡está casada! Pero ¿cómo ocurrió todo esto?
Según cuenta el portal News, la mujer pasa los días como la actriz Drew Barrymore en el filme “50 Primeras Citas” (o “Como si Fuera la Primera Vez”) luego de sufrir dos accidente de tránsito en oportunidades diferentes, los cuales la dejaron con graves heridas en su cabeza.
Específicamente, Michelle fue diagnosticada con epilepsia a sus 16 años lo que, sumado a un accidente en motocicleta en 1985 y un choque automovilístico en 1990, agravó seriamente su salud mental. Esto se hizo evidente en su trabajo cuatro años más tarde, cuando sus jefes se dieron cuenta de que todos los días fotocopiaba un mismo documento relacionado con una fecha determinada.
Como consecuencia de lo anterior, Philpots sufrió un severo daño en su memoria a corto plazo que se manifiesta de la peor manera: cada noche, su cabeza literalmente “se resetea” y vuelve a vivir los mismos eventosdiarios una y otra vez, como si fuera ese día en que su vida cambió hace 16 años atrás.
Pero, pese a su situación, en 1997 se casó con Ian Philpots (46) quien combatió las adversidades y, sabiendo que Michelle era la mujer de sus sueños, se dedicó desde entonces a hacer de su vida un juego en el cual intenta recordarle la realidad de distintas formas: desde mensajes en Post-It, recordatorios en celulares, videos, entre otros.
En palabras de la mujer, quien está conciente de su problema, la vida es rutinaria: “Cuando me despierto, todo lo que está fuera de la ventana es lo mismo. Es difícil de explicar, pero todos los días son normales. Es como si viviera el mismo día una y otra vez. Mi memoria se ha ido y no hay forma de que vuelva”.
Por último, la resignada inglesa confesó que cuando, en ocasiones contadas con la mano, sale de casa debe llevar con ella un GPS que la ubique por las calles.