Cuando el terremoto azotó a Haití el 12 de enero pasado, atrapó al documentalista americano Dan Woolley entre las colapsadas paredes del Hotel Montana en Puerto Píncipe. Una de sus piernas estaba gravemente herida pero, por suerte, traía consigo su iPhone.

Al principio, Woolley usó el flash de su cámara para iluminar el espacio en el cual estaba atrapado y también para sacar fotos y analizar dónde estaba enterrado.

Gracias a estas fotografías, Woolley supo que estaba cercano a un ascensor pero no encontró nada que pudiera salvarlo. En medio de la desesperación, el documentalista esperó que alguien lo rescatara.

Pero luego, se acordó que en su iPhone tenía una aplicación que se llamaba Pocket First Aid & CPR (Pocket Botiquín de Primeros Auxilios y Resucitación), de la Asociación Americana del Corazón, y que descargó por 2 mil pesos.

En Venturebeat comentan que esta aplicación le explicó cómo vendarse la fractura en su pierna, al mismo tiempo que algunos golpes en la cabeza.

Pero, lo más importante, fue que la aplicación le indicó que si se quedaba dormido sería fatal para la condición en que se encontraba.

Por esto, Woolley puso la alarma de su teléfono para que sonara cada 20 minutos. Gracias a su batería totalmente cargada fue capaz de mantenerse despierto todo el rato, por al menos 65 horas hasta que el rescate francés lo recogió.

En este video que te mostramos en Radio Bío-Bío, Wollery lee desde un cuaderno en donde escribe a su familia y les comunica “No estén molestos con Dios. El siempre provee a sus hijos”.