Molesto se encuentra el director regional de Chiledeportes, Carlos Aranda, debido a que aún no logra reunirse con los dirigentes de Santiago Wanderers para entregarles el detalle de los daños sufridos por el Estadio Valparaíso, luego del pleito amistoso entre los porteños y Universidad de Chile, el sábado 9 de enero.
Los daños que se han reflejado, especialmente, en la destrucción de algunas butacas y en la pista de rekortán, que tiene diversas áreas quemadas producto de la caída de bengalas sobre la pista atlética, a lo que se agrega la destrucción de varias zonas del codo norte por la acción de objetos contundentes y piedras lanzadas por la barra “Los Panzers”.
El director regional de Childeportes, propietario del recinto playanchino, explicó que la idea era agendar una cita la semana pasada, lo que no se produjo debido a una solicitud de los dirigentes, quienes estaban dedicados a la contratación de refuerzos, sin embargo, insistió que la cita no puede pasar del próximo fin de seman
Cabe recordar que los incidentes vividos en Playa Ancha provocaron fuertes cuestionamientos por parte de Carabineros a la dirigencia de Santiago Wanderers y los administradores del recinto, debido a que no existían mecanismos para separar de mejor manera a las barras en los compromisos de alta convocatoria.