“He pasado 50 horas ahí dentro ¡50 horas!”, exclama Richard Santos, norteamericano de 47 años rescatado de las ruinas del Hotel Montana de Puerto Príncipe, donde los socorristas hallaron la noche del jueves a 23 sobrevivientes del terremoto de Haití.
Situado en la parte alta de Puerto Príncipe, la capital haitiana devastada el martes por un terremoto, el hotel se transformó en un montón de escombros en el que socorristas franceses, estadounidenses, chilenos y venezolanos tratan de encontrar supervivientes desde el jueves.
Cada equipo está encargado de un sector: los franceses buscan en lo que era la sala de deportes y la recepción, los norteamericanos en un ala en la que había habitaciones.
Poco antes, socorristas norteamericanos habían salvado a una francesa. “Si hiciera falta una prueba de que es efectivamente francesa, hay que decir que esta dama nos pidió un vaso de vino. Que no le dimos”, dice bromeando Rebecca Gustafson, de la agencia estadounidense de ayuda al desarrollo (USAID).
“En el curso de la noche, los expertos chilenos que vinieron y los perros amaestrados han trabajado con equipos de rescate de otros países y han aparecido 23 personas vivas en el hotel”, dijo en Santiago el ex canciller Juan Gabriel Valdés, ex jefe de la misión de Estabilización de la ONU en ese país (Minustah).
“Hay sectores del hotel que están más colapsados que otros, pero anoche ha habido estos desarrollos y sin duda que es bastante extraordinario”, agregó Valdés, que encabeza un grupo de expertos chilenos enviados especialmente a Haití para colaborar en la tragedia.
El Hotel Montana -uno de los más lujosos de Puerto Príncipe- se vino abajo tras el terremoto del martes. En él se encontraba María Teresa Dowling, esposa del segundo hombre a cargo de las tropas chilenas en ese país, Ricardo Toro, quien aún no aparece.
El miércoles el secretario francés de Cooperación, Alain Joyandet, señaló que en el momento del sismo había unas 300 personas, de las cuales solamente 100 pudieron salir.
Por otra parte, treinta haitianos fueron rescatados por socorristas franceses en otros puntos de la capital haitiana, anunció el viernes en París el ministro francés de Relaciones Exteriores, Bernard Kouchner.
Precisó que unos 100 rescatistas franceses se afanan en la búsqueda de sobrevivientes en “cinco sectores” de la ciudad. De ellos, 60 están trabajando en el hotel Le Montana.
El jueves por la noche, los 30 militares franceses de la protección civil y sus cuatro perros pudieron auxiliar a siete estadounidenses y una haitiana, que estaban atrapados en un bolsón de la recepción del hotel, cuyo techo de hormigón se desplomó con el terremoto.
“Para personas que han pasado 50 horas bajo los escombros, están en un estado de salud correcto”, indica el comandante francés Samuel Bernes.
La primera norteamericana extraída del montón de placas de hormigón, Carla Shawn, de 65 años, “dio las gracias al gobierno francés y a los bomberos” antes de comer “un bizcocho de ración de combate”, cuenta Bernes.
Richard Santos, el segundo estadounidense salvado, daba la impresión de estar en buena forma y respondió a algunas preguntas de la prensa mientras era atendido por los médicos del equipo de socorristas.
“He pasado 50 horas ahí dentro, ¡50 horas!”, exclamó.