El director de la sección española de Greenpeace detenido en Dinamarca desde mediados de diciembre con otros tres responsables de la organización denunció este martes que son “humillados” y tratados como “perros”, durante un encuentro en la cárcel con su esposa del que informó El Mundo.

“Nos tratan como a perros”, “tratan de humillarnos y rompernos”, declaró Juan López de Uralde, según El Mundo, tras la visita de su esposa, Koro Castellano, y de su hermano.

Junto a él están encarcelados en la prisión danesa de Vestre Faengsel la activista noruega Nora Christiansen, el suizo Christian Schmutz y el responsable internacional de la campaña de energía y cambio climático de Greenpeace, el holandés Joris Thijssen, todos en régimen de aislamiento y a la espera de juicio hasta el 7 de enero.

La visita “ha tenido lugar bajo altas medidas de seguridad, con la presencia de un policía y una traductora y también ha contado con la presencia del cónsul español en Copenhague” y “en el encuentro sólo han podido hablar de temas personales, ya que los relacionados con el caso (incluso referencias a la cobertura mediática del caso en España) estaban vetados”, indicó Greenpeace en un comunicado.

López de Uralde relató a sus familiares “las condiciones duras y desproporcionadas” de su detención, el 17 de diciembre, tras la cual “permanecieron, junto a otros 60 detenidos, durante 24 horas en una estancia con tan solo unas colchoneta en el suelo y una cámara de seguridad en el techo”.

Además, “en repetidas ocasiones ha tenido que desnudarse para los registros”, incluso tras la visita de su abogado y su familia este martes.

“La familia le llevó comida, como chocolates y turrones, así como varios libros, pero la policía no permitió que se los entregara”, según el diario El Mundo.

Greenpeace también denunció que desde el lunes, “los activistas han sido mezclados con presos comunes”, por lo que “el ministerio de Asuntos Exteriores español, a través de la embajada, ha pedido su inmediata separación de presos comunes y la vuelta a la situación en la que se encontraban”.

Tres de los responsables fueron detenidos tras entrar sin ser advertidos por el servicio de seguridad en el palacio de Christiansborg, donde iban a cenar los más de cien jefes de Estado y de gobierno participantes en la cumbre del Clima en Copenhague.

López de Uralde desplegó una pancarta en la que se leía “Politicians talk, Leaders act” (los políticos hablan, los líderes actúan).

El 7 de enero se celebrará una vista en la que la justicia danesa decidirá si dejarles en libertad sin cargos, en libertad con cargos en espera de juicio o en prisión preventiva.