Dios quiso que la mujer sea una “compañera del hombre”, y no su “esclava” o su “dominadora”, declaró el papa Benedicto XVI durante la audiencia general de este miércoles.
“Dios crea a la mujer a partir de una costilla de Adán y no, por ejemplo, a partir de su cabeza, para que ella no sea ni una dominadora ni su esclava, sino su compañera”, declaró el Papa, citando al teólogo medieval y obispo de París, Pierre Lombard.
“Como la mujer fue creada a partir de la costilla de Adán mientras él dormía, la Iglesia nació de los sacramentos que empezaron a prodigarse desde un lado del Cristo dormido en la cruz, es decir, de la sangre y del agua que nos han liberado del sufrimiento y nos han purificado de nuestra falta”, añadió.
Los temas de la familia son recurrentes en los discursos de Benedicto XVI.
El domingo, el Papa alabó a la familia “basada en el matrimonio entre un hombre y una mujer”, a la que hay que mantener según Benedicto XVI “protegiéndola y haciendo promoción, porque es de una importancia suprema para el presente y el futuro de la humanidad”.