Hoy serán formalizados por parricidio y homicidio calificado la madre y el padrastro del niño de 2 años que murió tras la brutal golpiza que sufrió al interior de su hogar, en la comuna de Peñalolén.
El menor de edad había sido abandonado por su progenitora y este año no más la mujer lo había recuperado.
El pequeño Daniel Maldonado murió la madrugada del martes en la clínica Las Condes a causa de un paro cardiorespiratorio que le sobrevino por las dos graves fracturas craneales y multiples lesiones que sufrió.
Su madre Sandra Ampuero de 36 años había declarado a médicos y policías que su hijo se había caído de la tina del baño.
Sin embargo, muy poco sustento científico tuvo está declaración y terminando además la mujer por confesar que su conviviente, lo había golpeado y azotado contra la pared y que ella había sido testigo de lo ocurrido.
La madre y el padrastro, Cristián Palma de 23 años hoy serán formalizado por parricidio y homicidio calificado, respectivamente, señaló el comisario de la Brigada de Homicidios de la PDI, Gilberto Opazo, al detallar la brutal golpiza de la que fue víctima el niño la madrugada del domingo .
Ese mismo domingo la madrugada durante el día acudió en compañía de Daniel hasta el barrio Meiggs a realizar las compras navideñas, pero sólo al día siguiente lo llevó a un recinto asistencial, y mintiendo, sobre las convulsiones que estaba sufriendo.
Su padrastro no confesó el crimen y así lo dejo de manifiesto entre monosilabos a la prensa.
El director del Sename, Eugenio San Martín, anunció la presentación de una querella.
Daniel a los pocos meses de vida lo abandonó su madre; fue adoptado por un matrimonio y en el que el hombre le dio su apellido. Sin embargo, tribunales volvió a entregárselo a la progenitora, quien junto a su conviviente –según vecinos constantemente lo maltrataban.
Incluso la madrugada del domingo algunos escucharon los gritos del niño suplicando que no lo siguierán golpeando. Claro que nadie alertó e hizo la denuncia a la policía.