Los intercambios comerciales en el mundo sufrirán este año una contracción “sin precedentes” de un 10%, a causa de la crisis económica mundial, indicó este lunes el director general de la Organización Mundial de Comercio (OMC), Pascal Lamy.
Lamy reconoció que los gobiernos habían tomado medidas positivas para capear la crisis, pero advirtió que aún no era momento de bajar los brazos.
“En febrero de este año, la crisis alcanzó su apogeo.Pasó menos de un año desde entonces, y hubo progresos, pero aún no estamos a salvo”, dijo el jefe de la OMC en un foro en la capital surcoreana.
El proceso de limpieza del sistema financiero, corroído por deudas impagables, “está a medio camino, pero avanza demasiado lentamente”, agregó.
Lamy considera por eso que “las presiones para adoptar medidas proteccionistas (…), con sus ganancias ilusorias para las economías nacionales, no desaparecerán tan rápidamente”.
Insistió en consecuencia en la necesidad de concluir de una vez por todas la Ronda de Doha, lanzada en 2001 para liberalizar el comercio mundial, aunque admitió que eso “sólo ocurrirá si todos (los países miembros de la OMC) están dispuestos a hacer un esfuerzo serio”.