El candidato independiente a la Presidencia, Marco Enríquez-Ominami, explicó este martes que su viaje a Brasil para reunirse con el presidente Luiz Inacio Lula da Silva pretende ser “una señal” al electorado sobre su interés en la integración regional.
Fuente: Agencia AFP.
“La reunión con Lula es para dar una señal de que daré prioridad a las relaciones continentales, he querido decirles a los chilenos que creo profundamente en eso”, dijo Enríquez-Ominami a la AFP poco antes de su reunión con Lula, prevista para el final de la tarde del martes.
Enríquez-Ominami trajo a Brasil su propuesta de que Chile organice el Mundial de Fútbol del 2026. “He propuesto que Chile sea sede del mundial 2026 (y esperaba) saber cuáles han sido los tremendos aciertos que ha tenido Brasil para ser sede del Mundial (2014) y además de las Olimpiadas (2016)”, dijo el ex socialista.
Enríquez-Ominami ya llevó su proyecto deportivo a la presidenta argentina, Cristina Fernández, “y tuvo gran recepción”, aseguró. Aunque dijo no haber decidido si apostaría por un evento solo para Chile, o binacional, posiblemente con Argentina o con Uruguay.
“Estoy abierto a cualquier mecanismo que pueda garantizar que Chile mejore su estructura deportiva y sea sede de un tremendo evento internacional. No tengo problema con que sea (un Mundial) binacional”, dijo.
En política externa, el candidato dijo que sus prioridades son “la integración con los países limítrofes (Perú, Argentina y Bolivia), y con los relevantes del cono sur, que son protagonistas de la actividad política, comercial y económica (Brasil, Argentina y México)”.
“Defenderé con fuerza el corredor bioceánico” entre Brasil, Bolivia y Chile, sostuvo en ese plano.