El entrenamiento matinal y privado de San Carlos de Apoquindo no satisfizo del todo al técnico Marco Antonio Figueroa al percatarse de la poca fluidez de los movimientos en el ensayo táctico distinto a lo que venía mostrando habitualmente el cuadro franjeado con tan sólo un hombre en punta.
El primero tiempo de la sesión futbolística marcó el ingreso de Roberto Guitiérrez como único delantero, manteniéndose la duda sobre la titularidad de Rodrigo Mannara que sólo será evaluado el sábado en la mañana con la esperanza de que al menos sea alternativa en la oncena estelar que enfrentará a Colo Colo. El resto del equipo es el mismo que terminó venciendo a Cobreloa en Calama, con el ingreso de Francisco Silva en el mediocampo, adelantando a Milovan Mirosevic junto con Damián Díaz en la creación y el ya mencionado Gutiérrez en delantera.
Los cambios se produjeron en la segunda fracción de la práctica, dejando fuera del equipo a Silva permitiendo la inclusión del atacante argentino Juan José Morales, haciendo dupla con el ex Everton, esquema que de alguna u otra forma dejó conforme al calvo estratego cruzado.
El baile “Axé” de ayer quedó en el pasado y hoy la práctica fue netamente enfocada al clásico frente a los de Tocalli y compañía, quedando absolutamente claro que la confianza es extrema en los cruzados al considerar el defensa Mauricio Zenteno que es el mejor momento del equipo desde la llegada de Figueroa a la banca de San Carlos de Apoquindo.
Además, el líbero de los cruzados se mantuvo al margen de los rumores que provienen del Monumental acerca de la presencia de tres hombres netamente de ataque (Ezequiel Mirallles, Cristián Bogado y Esteban Paredes, este último un poco más retrasado), comparando este sistema con el afrontado contra Unión Española en semifinales del torneo pasado, donde no les marcaron goles, pero cayeron por los penales.
Los cruzados vuelven a las prácticas mañana a las 11.00 horas también en forma privada.