Diversas reacciones ha causado la polémica presentación de Maroon 5 en Viña 2020, donde anoche se presentaron en la quinta jornada del evento.
La escasa interacción de su vocalista, Adam Levine, la duración del show y la decisión de no hablar con los animadores ni recibir Gaviotas en el escenario, causó molestia en el público televisivo del festival.
Para Mauricio Jürgensen, periodista especializado en música popular y ex panelista de Bienvenidos, lo que ocurrió anoche en la Quinta Vergara era algo que estaba dentro de las posibilidades.
“Los vi en noviembre de 2008, debutaban en Chile y escribí esto para La Tercera. Imagino que algo parecido a lo que muchos sintieron hoy”, comentó en su cuenta en Instagram, donde publicó la crónica que dio cuenta del show del grupo hace 12 años.
“Adam Levine (29) debe haber sido el más popular de la secundaria. El que salía con las porristas, con las chicas más bellas, al que todos saludaban en el pasillo de los casilleros, el que fue con el mejor auto a la fiesta de graduación”, se lee al inicio del texto.
Más adelante, analiza el perfil musical de la banda estadounidense: “El cantante de Maroon 5 (Los Angeles, 2001) es un ganador y el directo de su banda está diseñado para su total lucimiento”.
“Seis mil 500 personas vieron anoche en Movistar Arena al prototipo del nuevo cantante americano. A un carilindo que podría ser la voz solista de una ‘boy band’, pero que prefirió ser el líder de uno de esos tantos grupos que camuflan su ambición radial con un rock domesticado y de poco octanaje”, agregó.
“Son cinco en escena, bien equipados y con instrumentación de lujo, pero su amplitud sonora es similar a la que se obtiene desde los parlantes de un computador”, apuntó Jürgensen en su reporte.
“Partieron con This love, uno de los tantos hits emanados de sus dos discos oficiales, y tuvieron hora y media para satisfacer las mesuradas ambiciones de su público: las canciones de la radio y el carisma maqueteado de un tipo digno de catálogo de Calvin Klein”, concluye el texto.