Como un tablero de ajedrez, poco a poco comienza a despejarse el camino para algunos y se van cayendo algunas fichas. Todo esto, para llegar a la testera de la Convención y presidir por los próximos 6 meses al organismo.
El nombre de Patricia Politzer de Independientes No Neutrales (INN) comienza a perder fuerza, al igual que el de Cristina Dorador. Esto, ya que las negociaciones radican principalmente en el Frente Amplio y el Partido Socialista.
Ya es sabido que la socialista Ramona Reyes fue apoyada por su colectivo, e incluso se mostró optimista ante las negociaciones que se están realizando.
Pero hay otro nombre que comienza a alzarse: Beatriz Sánchez del Frente Amplio. Esto generó nuevamente tensión en el debate, considerando “la hegemonía” del poder.
Beatriz Sánchez entra al ruedo
El convencional frenteamplista Cristián Viera defendió la idea porque su sector llegue a la mesa principal, señalando que en el pasado también se daba, tomando como ejemplo los gobiernos de la exConcertación, que lideraba la Presidencia de la República y del Senado.
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El vicepresidente adjunto de la Convención, el socialista Pedro Muñoz, aseguró que el Frente Amplio debe abrir la cancha a otros sectores.
Esto último, considerando que Jaime Bassa ya tuvo su turno, y que el presidente de la República es Gabriel Boric.
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Hay división en la Convención ante cambio de mesa directiva
Para escoger a la próxima mesa directiva de la Convención se necesitan 78 votos. El PS contaría con más respaldos, y ahora, la disputa está entre el FA, los INN, Pueblo Constituyente, y los Movimientos Sociales Constituyentes.
Y lo cierto es que hay división en todos los sectores. En la derecha no hay una postura común para apoyar a Politzer, Dorador, Sánchez o a Ramona Reyes.
En la centroizquierda también hay dos alas. El convencional Fuad Chahín de la DC se refirió al punto, apuntando al riesgo de perjudicar el “clima de colaboración” que existe.
En esa línea, la constituyente Ruth Hurtado, de Vamos por Chile, sostuvo que se necesita un nuevo presidente de la Convención “más dialogante, más transversal”.
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A la Convención le queda poco más de seis meses para entregar la propuesta constitucional, y a propósito de la estrechez de los plazos, es que hoy el pleno votará un reajuste al cronograma general.