La convencional constituyente Tiare Aguilera, representante del pueblo Rapa Nui, descartó que su detención registrada la madrugada del domingo en Ñuñoa tenga “relación con violencia intrafamiliar”.
A través de un comunicado, la convencional aseguró que tras “una discusión verbal con mi pareja en nuestro departamento, él sale a caminar. Jamás hubo golpes o agresiones física”.
Lo anterior, tras la información policial que daba cuenta que vecinos alertaron de una discusión que contempló ruidosos gritos entre la convencional y un hombre al interior de su departamento. Esta situación habría ocurrido en presencia de su hijo, quien tiene tres años.
Tras ello, el conflicto se habría trasladado hasta la salida del edificio, donde Aguilera habría roto una de las mamparas.
Versión contraria a la que entregó la representante del pueblo Rapa Nui, quien aseguró que salió para pedirle a su pareja que conversaran, pero “se me cerró la puerta de entrada del edificio, con el celular sin carga y sin llaves. Nunca salí a la calle, me mantuve todo el tiempo en el espacio del edificio que no tiene nochero”.
Agregó que ante “la desesperación de tratar de entrar porque mi hijo de 4 años estaba solo durmiendo en su pieza, forcejee la puerta de entrada, lo que hizo que la mampara de vidrio se trizara. Fui al auto a ver si había alguna llave o cargado de celular y en ese momento sentí muchos carabineros entrando con linternas al edificio y al estacionamiento”.
Aguilera aseguró que se asustó con la presencia policial y que por eso se quedó cerca del auto. “Se acercan 6 carabineros, a los que intento explicar lo que había sucedido y que necesitaba entrar para saber cómo estaba mi hijo. En ningún momento me dejan subir, me señalan que me van a detener por los daños a la mampara y por haber dejado solo a mi hijo”.
De acuerdo a su relato, “me detienen muy violentamente, nunca me dijeron quién se iba a hacer cargo de hijo, y se burlaron de toda la situación”.
“Me esposaron con mucha fuerza y un carabinero puso sus manos en mi cuello ahorcándome hasta hacerme subir al vehículo”, agregó.
La constituyente afirmó que la liberaron a las 7:00 horas y que hizo un reclamo por malos tratos de parte del personal de Carabineros.
Para concluir aseguró que “llevamos años trabajando en la erradicación de la violencia intrafamiliar y nos duele profundamente la distorsión de los hechos ocurridos. Ningún ciudadano merece ser tratado así por los funcionarios que supuestamente deberían protegernos”.