Para evitar una posible fuga o rescate, la Fiscalía de Alta Complejidad de La Araucanía recurrió a la Corte de Apelaciones de Temuco para conseguir una orden de detención en contra del werkén de Temucuicui Jorge Huenchullán Cayul, quien está internado en el hospital de Victoria afectado por el Covid-19 y sería dado de alta este lunes 26 de julio.
Huenchullán Cayul es indagado por tráfico de drogas y posesión de municiones, luego que el 7 de enero del presente su casa fuera allanada en Temucuicui, comuna de Ercilla, en un operativo que contó con cerca de 800 funcionarios de la PDI. En la oportunidad, se decomisaron 1.277 plantas de marihuana; 40 kilos de marihuana procesada; más de $12 millones en efectivo; siete armas de fuego; y 148 municiones de diverso calibre.
Ese mismo día, producto de un disparo percutado por otros comuneros, falleció el subcomisario Luis Morales.
De acuerdo a los antecedentes recabados por la Unidad de Investigación de Radio Bío Bío, la solicitud del fiscal Felipe González busca revocar la decisión adoptada por la jueza de garantía de Collipulli, Sandra Nahuelcura, quien no accedió a la petición, este 22 de julio.
El intento judicial del Ministerio Público, en todo caso, tiene un pasado procesal en la misma causa que podría complicar sus pretensiones. Ocurre que en febrero pasado, la misma Nahuelcura dictó una orden de detención en contra de Huenchullán Cayul por los ilícitos mencionados, donde consideró que las evidencias obtenidas por la fiscalía eran mérito suficiente para ello.
Sin embargo, y solo después de cuatro meses, el organismo persecutor y la policía pudieron conocer el paradero del imputado, ya que el 30 de junio del corriente llegó hasta el centro asistencial afectado por el virus. Ese día se formalizó la detención de Huenchullán Cayul, pero no pudo ser formalizado, ya que se encontraba conectado a oxígeno y con síntomas que agravaban su salud. Por esta razón, se fijó para el próximo 29 de julio una audiencia para la comunicación de cargos.
En ese contexto, la fiscalía habría obtenido información de que Huenchullán Cayul estaría mejorando y sería dado de alta este lunes 26, lo que encendió las alarmas. Por esta razón, el perseguidor Felipe González ordenó -el 22 de julio- a la Brigada Antinarcóticos y Crimen Organizado de Angol que proyectaran un escenario operativo ante una eventual fuga o rescate del comunero.
La policía emitió el informe el mismo día y detectó que Huenchullán Cayul está hospitalizado en el sector sur del establecimiento, que a su vez tiene seis vías de acceso. Una de ellas, argumenta la fiscalía ante la corte regional, se ubica a menos de 50 metros de la vía pública.
Con esa información el fiscal González insistió vía telefónica con el tribunal para conseguir una orden que impidiera a Huenchullán Cayul abandonar el recinto y que desapareciera del radar policial, recibiendo como respuesta que debía atenerse a la fecha decretada.
La apelación presentada por González sería revisada hoy por el tribunal de alzada que podría confirmar el criterio de la magistrada o bien dictar una nueva orden de detención.
En 2018 Huenchullán Cayul también fue condenado por tráfico de drogas
El gran golpe fallido
Los hechos por los cuales el Ministerio Público insiste en detener a Huenchullán Cayul se remontan al 7 de enero de 2021, cuando la PDI realizó un megaoperativo al interior de la comunidad de Temucuicui, en la comuna de Ercilla. Uno de los objetivos era el domicilio de Huenchullán, ya que la información obtenida durante la investigación indicaba que -al menos- hallarían droga.
Policías de civil desde varios puntos del país se trasladaron a la región de La Araucanía para ejecutar el procedimiento. Uno de ellos fue el subcomisario Luis Morales Balcázar, de dotación del Equipo de Reacción Táctica (ERTA) Iquique.
No obstante, algo salió mal esa mañana. La entrada de los detectives fue resistida a tiros por desconocidos. En el fuego cruzado, un proyectil terminó en la cabeza de Morales, quien falleció esa misma tarde.