Pasan las horas y la polémica por la baja de cuatro jugadoras de La Roja femenina para la final de los Juegos Panamericanos de este viernes está más encendida que nunca.
Recordemos que Christiane Endler, Antonia Canales, Camila Sáez y Karen Araya debieron volver a sus clubes, debido al término de la fecha FIFA. Una situación que perjudica futbolísticamente al plantel liderado técnicamente por Luis Mena.
Lo más grave, es que en ese grupo de ausentes de encuentran dos arqueras. Las únicas dos que formaban parte del total de 18 inscritas. Es decir, Chile deberá ubicar a una jugadora de campo en portería contra el difícil México. Riesgo total.
Tras multiplicarse las críticas por esta insólita situación, el gerente de selecciones de La Roja, Rodrigo Robles, salió al paso a explicar qué fue lo que ocurrió y si estaba en planificación la ausencia de las cracks.
El caso Christiane Endler: “Regresó en la fecha que siempre estuvo planificado entre todas las partes”
El primer tema que abordó Robles fue la salida de Christiane Endler, capitana y referente principal del equipo, que además informó su retiro del representativo nacional.
“Como los partidos comenzaban el 22 de octubre, se solicitó al club de Christiane Endler, Olympique de Lyon, que ella excepcionalmente pudiera arribar previo al debut, es decir, antes de la fecha FIFA, ausentándose por ese motivo al partido de ese fin de semana de la liga de Francia”, empezó diciendo el gerente.
Por lo mismo, detalló, ya no era posible extender su estadía más allá del período oficial internacional de selecciones.
“De acuerdo con lo que señala el reglamento de fecha FIFA, la jugadora se debe presentar a su club a las 48 horas posteriores del cierre. Y así fue. Ayer viajó de retorno a Francia como siempre estuvo planificado entre todas las partes. Y así dar estricto cumplimiento al compromiso adquirido”.
Araya, Sáez y la furia contra Valencia FC
En cuanto a la bajas de Camila Sáez y Karen Araya, ambas futbolistas del Madrid FC, Robles sostuvo que no hubo un acuerdo especial, sino que su participación se realizó en relación a la fecha FIFA.
“Ellas se presentaron en la fecha FIFA en forma señalada (no jugaron el primer partido, de hecho), dando estricto cumplimiento a reglamentación”, acotó.
Por ende, tanto Sáez como Araya marcharon, también, apenas se acabó el período.
Lo que distinto, para Rodrigo Robles, fue lo acontecido con Antonia Canales y el Valencia de España.
“Se dialogó y gestionó con el club Valencia de nuestra segunda arquera, Antonia Canales, la posibilidad de ajustar, de común acuerdo, la fecha de su estadía en los juegos. Sin embargo, el acuerdo fue distinto al Lyon. Antonia se presentó al inicio de la fecha FIFA, no antes, y fue autorizada a retornar en una fecha posterior con objeto de estar presente en disputa de medallas, si esto sucedía”, aseguró.
Pero todo cambió de plano. “Previo a las semifinales, el Valencia nos informa que producto de una lesión de su arquera titular, no estaba en condiciones de llevar a cabo el compromiso adquirido con la Roja y que la jugadora debía retornar con su club al final del período de reglamentación”, agregó.
“Previo al viaje de Antonia retorno a España se insistió con el club de la necesidad imperiosa de mantener lo acordado, toda vez que la planificación del Cuerpo Técnico había sido construida en base a los acuerdos con los clubes de ambas porteras. De lo contrario se había prescindido de una de ellas, o la planificación habría sido distintas”, justificó. Sin embargo, la respuesta del conjunto ‘Che’ fue negativa.
Finalmente, pese al complicado escenario de cara a la final, Robles recalcó que “agradecemos profundamente a las jugadoras por su compromiso y profesionalismo desplegado. Han alcanzado la instancia de disputa del oro panamericano, un logro histórico”.
