Según información del Servicio Electoral (Servel), la cantidad de votos nulos que hubo en las elecciones constitucionales del domingo pasado fue de 2.119.506 sufragios, que en porcentaje equivale al 16,98%.
Expertos y académicos analizaron estos resultados y los factores que pudieron desencadenar este escenario, teniendo en cuenta que el voto era obligatorio y que existía un ambiente de “desinformación” dentro de la ciudadanía.
Respecto a esto, la académica del Campus Creativo de la Universidad Andrés Bello y miembro de la Red de Politólogos, Daniela Campos, comentó que “en términos cuantitativos es súper sorpresiva la votación, nunca habíamos tenido tal cantidad de nulos teniendo una votación obligatoria”.
“En términos cualitativos, a mí personalmente no me sorprendió tanto porque como se ha dicho en otros contextos, este proceso constitucional no ha tenido el mismo protagonismo que tuvo el primero, no ha cautivado a la ciudadanía de la misma manera”, manifestó la experta.
En cuanto a las conjeturas que uno podría sacar, Campos señaló que “por ejemplo, mucha gente que votó apruebo, en esta votación votó nulo porque no confiaban en este proceso, porque no los representaba, no era el que ellos habían elegido. Ellos habían elegido uno que fuera escrito por la ciudadanía, no por políticos ni partidos”.
Alta cantidad de nulos en las elecciones
En tanto, el director del Instituto de Estudios Avanzados de la Universidad de Santiago de Chile y doctor en ciencia política, Raúl Elgueta, dijo que aquí “hay un incremento en los votos nulos que es innegable”, añadiendo que otro factor que influye es “la percepción de la importancia que tiene la elección”.
“El incremento podría ser interpretado por alguna gente que consideró que esta elección no era muy trascendente, que los resultados no iban a cambiar mayormente (…). Yo me inclino más por la tesis no anómica, sino más bien de que podía ser algo irrelevante un poco la elección”, precisó el politólogo.
En esta línea, Elgueta desechó la tesis de que “esto es una bofetada para el sistema y que no quieren participar”.
Miguel Ángel Fernández, quien es docente investigador de Faro UDD, explicó que “el porcentaje de votos inválidos que se vivió en esta elección no solo es inusual para Chile sino que para el mundo con sistema obligatorio”.
“Con el 17% de nulos y el 4,5% de blancos quedamos a un nivel semejante a países como Perú y Ecuador, quienes están en la parte más alta de la tabla mundial”, añadió el profesor.
Desinformación
En relación al concepto de desinformación que se pudo haber generado en este proceso, Campos dijo que “la ciudadanía no entendía si tenía que estar votando por una nueva Constitución o si tenía que aprobar al Gobierno, si estaba aprobando una agenda de delincuencia, por lo que había desinformación por ese lado”.
“Yo creo que hay gente que va a votar rechazo, que está avisando que va a votar rechazo, diciendo esto yo lo anulo acá, porque finalmente va a votar rechazo. Estas son las primeras impresiones y lecturas”, añadió la académica de la Unab.
Elgueta también enfatizó en la desinformación del proceso, donde gente pudo haber “marcado más de una lista, porque se pueden producir efectos como cambiados, es decir, hay alguna gente que marcó varias preferencias en las distintas listas”.
“No hubo estrategias de lista, salvo el caso Republicano que fue el más exitoso. Más que una estrategia de caras, a diferencia de la derecha tradicional, en el caso Republicano la marca Republicanos fue la que se ofertó más”, precisó el académico.
Por su parte, el experto de Faro UDD dijo además que los tiempos de la campaña fueron acotados. “Ello tuvo como consecuencia que las candidaturas centraran sus esfuerzos en los grandes polos de concentración poblacional y dejaran de lado la movilización en sectores de menor tamaño. Los datos de este domingo muestran efectivamente dicha relación, lo que refuerza la idea de falta de información. A esto se le debe sumar una débil campaña comunicacional por parte del gobierno”, apuntó el experto.
Cecilia Domínguez, quien es encargada de Formación de la Secretaría de Participación Ciudadana y académica de la Facultad de Derecho de la Universidad de Chile, atribuyó la alta cantidad de nulos a que “la gente estaba absolutamente desinformada del proceso constitucional. Si uno mira cuáles son las campañas que tuvieron mayor éxito, fueron aquellas que no hicieron alusión al proceso constitucional”.
“Una de las razones de por qué hubo mucha votación nula, es porque no se entendió nunca, no se comunicó bien, para qué era el proceso (…)”, detalló la profesora de la U. de Chile, añadiendo que los electores además “no sabían por cuántas personas había que votar”.
“Fatiga y desgaste electoral”
La experta de la Unab también indicó que “hay un problema de desgaste electoral donde la ciudadanía va a votar y ya no sabe por qué va a votar. Hay confusión, hay desinformación”.
“Es un proceso que está demasiado elitizado, entonces se aleja de la ciudadanía y a la ciudadanía ya no le interesa, y está más preocupada de la agenda de delincuencia”, precisó la politóloga.
Raúl Elgueta también habló sobre un “fastidio electoral”, el cual podría ser parte “de la explicación de la extraordinaria votación de los Republicanos. El tono de la elección lo interpretó de mejor manera el Partido Republicano”.
A nivel general, Fernández dijo que “los nulos se explican por dos factores: un voto de castigo o desgaste y un voto por falta de información que produce que los votantes cometan errores. En el caso de esta elección ambas hipótesis toman fuerza. La gran batería de elecciones produce fatiga electoral, que se traduce en una disminución del interés por el proceso eleccionario y que termina por arrastrar a los ciudadanos a rechazar a las opciones electorales”.