Holanda se clasificó para la primera final de su historia en el Mundial de fútbol femenino tras vencer 1-0 en la prórroga a Suecia, este miércoles en Lyon, con lo que será el adversario el domingo de Estados Unidos en el pulso decisivo por el título.
Tras acabar los noventa minutos reglamentarios con empate sin goles, la semifinal en el estadio Parc OL se decidió con un gol de Jackie Groenen en el minuto 99.
De esta forma, Holanda, dos años después de haberse proclamado campeona de Europa en una edición disputada en su país, aspirará a lograr el mayor éxito de la historia de su fútbol femenino.
Es apenas el segundo Mundial femenino que disputa la ‘Oranje’, después del de hace cuatro años en Canadá, donde se había quedado en los octavos de final, por lo que la progresión ha sido espectacular.
Tanto estadounidenses como holandesas han ganado sus seis partidos en lo que va de Mundial. En el caso de las europeas, tras un pleno de tres triunfos en su grupo, superó en octavos 2-1 a Japón, la campeona mundial de 2011, y en cuartos 2-0 a Italia, una de las revelaciones de este año.
Suecia, vigente subcampeona olímpica y que fue subcampeona del mundo en 2003, se queda en puertas de la final, tras un torneo en Francia en el que había logrado sorprender en cuartos a Alemania, dos veces campeona mundial.
En la primera parte, ambos equipos empezaron con gran respeto por el rival.
La primera gran oportunidad la tuvo la holandesa Lineth Beerensteyn, pero su intento desde lejos fue detenido por la arquera Hedvig Lindahl (minuto 17).
Suecia hacía daño al contragolpe pero no conseguía acertar en la finalización.
Estuvo cerca del gol en el 36′, cuando la sueca Lina Hurtig tuvo la mejor ocasión antes del descanso, con un remate que sacó con un pie la guardameta holandesa Sari Van Veenendaal.
Groenen, decisiva
En el descanso fue sustituida la atacante holandesa Lieke Martens, jugadora del FC Barcelona y que era duda antes del partido por problemas en un dedo del pie.
Suecia rozó el tanto con un remate de Nilla Fischer (55′), que tocó lo justo Van Veenendaal para que el balón terminara estrellándose en el palo.
Holanda vivió poco después una jugada similar, en el que un remate de cabeza de Vivianne Miedema (63′) fue tocado por la arquera escandinava Lindahl antes de que la pelota fuera al larguero.
En la recta final, ambos equipos intentaron un gol antes de la prórroga: la sueca Magdalena Eriksson (87′) lo hizo con un tiro ligeramente alto y Shanice Van de Sanden estuvo a punto de lograr la victoria holandesa con un disparo que obligó a una gran intervención de Lindahl en el 90+1′.
En la prórroga llegó el zarpazo que decidió la identidad del equipo finalista.
Fue asestado por Jackie Groenen, jugadora del Frankfurt alemán, que en el minuto 99 envió un tiro raso ajustado desde la frontal del área que sorprendió a la guardameta sueca y puso un 1-0 que terminó siendo definitivo.
La ‘Marea Naranja’, la numerosa hinchada holandesa desplazada a Francia, tendrá su ansiada final y seguirá dando color a las calles de Lyon, donde el domingo se decidirá la selección campeona.
