Polémica han causado los recientes tweets de Doja Cat, artista que el fin de semana pasado fue protagonista de la versión 2022 de Lollapalooza Chile.
Tras la cancelación de su concierto en Paraguay, donde era una de las figuras del Festival Asunsiónico, la cantante reaccionó de este modo en su perfil oficial en Twitter:
“Hubo una tormenta en Paraguay, el show fue cancelado. Cuando me fui a la mañana siguiente, no había ni una sola persona afuera del hotel esperándome… Ni siquiera una”, escribió en el post que luego eliminó.
“Me arrepiento de todo el tiempo que gasté alistándome ese día para el show por el que me estuve rompiendo el lomo para ustedes, pero Dios bendiga”, agregó en otro mensaje.
En redes sociales, los dichos de la rapera desencadenaron el hashtag #DojaCatisoverparty, a modo de funa y represalia. Consultada por dónde había quedado su humidad, Doja Cat respondió: “Se ha ido y ya no me importa una mierda, renuncio, no puedo esperar a desaparecer y ya no necesito que creas en mí”.
“Todo está muerto para mí, la música está muerta, y soy una maldita tonta por haber pensado que estaba hecha para esto. Esta es una maldita pesadilla. Deja de seguirme”, añadió.
Ayer, tras su presentación en Brasil, el ánimo virtual de Doja Cat no varió demasiado, y en el intertanto cambió su nombre en la red social por “I Quit” (“Lo dejo”).
“No creo que haya dado un show lo suficientemente bueno y lo siento por eso, pero gracias chicos por venir, los amo y gracias a Dios tenemos otro show mañana, prometo que lo haré mejor”, señaló
Luego, hace 12 horas atrás, optó por un mensaje aún más enfático: “Esta mierda no es para mí, así que me voy. Cuídense todos”. Desde entonces, no ha vuelto a referirse a la polémica.