De la sorpresa a la cautela. Esa fue la evolución que causó el Índice Mensual de Actividad Económica (Imacec) de diciembre recién pasado, revelado este lunes por el Banco Central y que arrojó -contra todas las expectativas- un crecimiento de 1,1% en comparación con igual mes del año anterior (2018).
La cifra significa un alivio para las finanzas chilenas, considerando el retroceso del 3,3% y 3,4% que se había registrado en octubre y noviembre, respectivamente.
El avance fue celebrado por el Presidente Sebastián Piñera, quien a través de Twitter apuntó a “la paz, acuerdos y crecimiento” para seguir mejorando.
“Crean trabajos y oportunidades, mejoran salarios y generan recursos para financiar gasto social. Sigamos el camino de un #ChileJuntos”, escribió.
“La violencia destruye empleos y sueños”, añadió.
Pese a lo mencionado por el mandatario, el discurso del ministro de Hacienda subrogante, Francisco Moreno, estuvo centrado en la cautela.
“Queremos ser especialmente cautos (…) Vamos paso a paso en esta agenda social, cuidando por sobre todas las cosas el desarrollo económico”, sostuvo.
Cobre juega rol clave
La prudencia de Moreno está marcada en parte por el rol clave que jugó la actividad económica minera (o Imacec Minero). En buenas cuentas, el cobre fue el principal responsable de que las cifras fuesen positivas, al crecer un 3,7%.
Así lo señaló el gerente de Estudios de la Cámara de Comercio de Santiago, George Lever, quien explicó que la actividad minera no ha sido afectada por la coyuntura interna.
A ello agregó que “algunos indicadores se han ido normalizando, pero para marzo el nivel de incertidumbre” sigue siendo alto.
“Hay un riesgo objetivo de que se generen nuevamente episodios de violencia”, precisó.
Justamente, el presidente de la Asociación de Industrias Metalúrgicas y Metalmecánicas, Dante Arrigoni, sostuvo que las proyecciones de crecimiento siguen siendo “inestables”, y para lograr la reactivación se requiere de mayor inversión.
“Si Chile quiere pagar los compromisos que está adquiriendo el Gobierno y el Estado por las demandas sociales necesitamos crecer del orden del 4%. Para eso Chile necesita modernizar el modelo de crecimiento y para eso es fundamental tener políticas de desarrollo productivo con una industrialización moderna”.
Turismo
Los números contrastan con el Imacec No Minero, el que creció un 0,8%. Los resultados se explican por el desempeño favorable de las actividades de construcción e industria manufacturera.
Sin embargo, este mes, a diferencia de lo ocurrido en octubre y noviembre de 2019, el único sector que aparece incidiendo negativamente es educación, dejando afuera a transporte y restaurantes y hoteles, los que entonces se apuntaban como la causa del retroceso de la actividad económica nacional.
Esto último llama la atención, considerando que el turismo nacional vio una caída del 11,9% en pernoctaciones en diciembre de 2019.
Este resultado se explicó por la contracción interanual en las pernoctaciones de pasajeros residentes en Chile, los que disminuyeron 8,2%, mientras que los residentes en el extranjero presentaron una variación de -18,0% en doce meses, indicó el INE.
De acuerdo con la Encuesta Mensual de Alojamiento Turístico (EMAT) publicada este lunes, en diciembre de 2019 se registraron 1.714.383 pernoctaciones, disminuyendo 11,9% en doce meses.
El mayor nivel de éstas se registró en la región Metropolitana de Santiago (509.806), con una baja de 18,3% en relación con diciembre de 2018, seguido por Valparaíso (194.089) que presentó una variación de -24,9%.
Los destinos turísticos que concentraron el mayor número de pernoctaciones fueron Santiago urbano (464.146), Valparaíso, Viña del Mar y Concón (93.386) y La Serena y Coquimbo (77.329).
No es suficiente
Así las cosas, expertos apuntan que la sorpresa de diciembre no es suficiente. El economista y académico de la Universidad de Santiago, Víctor Salas, explicó en conversación con el Expreso Bío Bío que las cifras no son positivas.
Según argumentó, el trimestre octubre-diciembre suele registrar mayor actividad, aunque aseguró que las cifras reflejan una mayor “resiliencia” de la economía nacional.
“Deberíamos tener alrededor del 3% o 4%. Esas son las tasas normales de noviembre-diciembre. Ahora estamos en la coyuntura después del 18 de octubre, pero lo que estamos viendo es que nos estamos recuperando más rápido de ese hecho”, sostuvo.
En esa misma línea, el analista de Alpari Research, César Valencia, sostuvo que el hecho de descartar una recesión técnica podría ser un factor positivo para las perspectivas de inversión, pero es “difícil hablar de que pueda haber una reactivación económica”.
Ello, considerando que es poco probable crecer por sobre las expectativas fijadas por el Banco Central, las que rondan entre el 0,5% y el 1,5%.
“Antes de los hechos ocurridos el 18 de octubre las proyecciones de crecimiento se situaban en torno a un 2,5%. Hay un impacto significativo en la baja del crecimiento económico que nos debe hacer reflexionar”, cerró el ministro (s) de Hacienda, Francisco Moreno.