La neerlandesa Sharon Van Rouwendaal ganó el oro en la competición de aguas abiertas de los Juegos Olímpicos de París 2024, mientras que la brasileña Ana Marcela Cunha, campeona en Tokio, quedó por fuera del podio en una prueba celebrada en el río Sena, tras meses de incertidumbre por la calidad del agua.
Campeona en Río 2016 y plata en Tokio, la nadadora, de 30 años, se impuso con un tiempo de 2:03:34.2, por delante de la australiana Moesha Johnson (+5,5 segundos) y la italiana Ginevra Tadeucci (+8,6).
Este triunfo quedó marcado en la emocionante celebración de Van Rouwendaal, que explicó en sus declaraciones que le dedicó la medalla olímpica a su perrito fallecido hace unos meses.
La deportista europea indicó que sintió un duro golpe por la partida de su querida mascota previo al inicio de los Juegos Olímpicos.
“Necesitó una operación y se complicó. Lo era todo para mí. Nadar es importante pero mi familia y mis perros lo son más“, apuntó a los medios.
“Cuando murió mi perro, mi mundo se detuvo. No quise nadar durante semanas, tenía mucho estrés y llegué a perder tres kilos. Pero mi padre me animó y me dijo que tenía que hacerlo por él. Han sido siete años y quise competir en otros Juegos Olímpicos para rendirle el homenaje que merecía”, dijo emocionada.