La taiwanesa Lin Yu Ting, una de las dos boxeadoras de los Juegos Olímpicos 2024 involucradas en una polémica, venció este viernes en su estreno en París a la uzbeka Sitora Turdibekova por decisión unánime.
La participación de Lin, que avanzó a los cuartos de final de los 57 kilos, y de la argelina Imane Khelif recibió numerosas críticas debido a que un año atrás fueron descalificadas del Mundial por fallar una prueba de género cuyos detalles se desconocen.
El Comité Olímpico Internacional (COI) ha defendido en varias ocasiones su decisión de permitirlas competir en la capital francesa asegurando que “está establecido que son mujeres“.
La polémica estalló el jueves después de que la primera rival de Khelif, la italiana Angela Carini, se retirara entre lágrimas tras solo 46 segundos de combate, en los que recibió varios fuertes golpes en el rostro.
Las imágenes de la pelea se extendieron rápidamente por las redes sociales con figuras del deporte, como Martina Navratilova, y de la política, desde la primera ministra italiana, Giorgia Meloni, al expresidente estadounidense Donald Trump, criticando la autorización del COI a la participación de Khelif.
En su primer turno en el ring, Lin exhibió una mayor movilidad y pegada frente a Turdibekova que le permitió dominar el combate desde el principio.
Lin dejó plantada a una multitud de periodistas que esperaba su versión
Luego del combate con la uzbeka, la taiwanesa se marchó rauda sin hacer declaraciones pese a la multitud de periodistas que se agolpó en la zona mixta.
Así, la púgil de 28 años le hizo el quite a las preguntas sobre el escándalo por los problemas de género en el boxeo de París 2024. Incluso, su entrenador apareció en escena para pedir a los reporteros que solamente hablen del combate ante Turdibekova.
Sectores reclaman porque la deportista asiática, quien es biológicamente mujer, no pasó el test de elegibilidad en el campeonato mundial de marzo pasado. De todos modos, sí se le permitió competir en la capital francesa.