La mañana de este jueves, el presidente del Colegio de Profesores, Mario Aguilar, habló en duros términos de la Prueba de Selección Universitaria (PSU) y también del sistema de admisión a las casas de estudios superiores, por lo que hizo un llamado al Consejo de Rectores (Cruch) a modificar la forma en la cual estos planteles aceptan a sus estudiantes y recordó lo bueno que tenía la Prueba de Aptitud Académica (PAA).
En conversación con nuestro medio asociado CNN Chile, el dirigente afirmó que como gremio han sido “muy críticos” de este examen desde hace “mucho tiempo”. “Hemos solicitado que esa prueba debe ser superada, debe dejarse de lado, debe establecerse un sistema de admisión universitario mucho más justo, más equitativo”.
“Este actual ya está lo suficientemente diagnosticado que es un sistema segregador, es una prueba clasista, machista, tiene sesgos de género muy fuerte”, añadió.
“Nosotros esperamos que este sea el último año que se rinda, porque es parte de este modelo educativo que estamos cuestionando y que la ciudadanía está cuestionando, un modelo deshumanizado”, agregó Aguilar.
Pese a que reconoció que actualmente los tiempos son acotados, por lo cual se entiende que se sigan las reglas de admisión ya dispuestas para este proceso, llamó al Cruch a analizar cambios para implementarlos en el futuro próximo.
“Yo creo que la decisión del Cruch de revisar la prueba estos días de enero es adecuada, atinada, y particularmente pensando en los estudiantes que se han preparado, que no se les pueden cambiar las reglas del juego de un día para otro. Sería un perjuicio para ellos que el sistema cambiara abruptamente de aquí a marzo”, señaló Aguilar.
No obstante lo anterior, reiteró su deseo que esta PSU del 6 y 7 de enero sea la última rendición de la medición, a la que tildó de ser “absolutamente desfavorable para la mayoría de los estudiantes del país”.
Convocatoria a funa
Este jueves venció el plazo que la Asamblea Coordinadora de Estudiantes Secundarios (ACES) le impuso al Cruch para que postergara la rendición de la PSU por tercera vez.
Ello ya que a juicio de su vocero, Víctor Chanfreau, no se encuentran las condiciones óptimas para rendir el examen considerando los casos de estudiantes lesionados por fuerzas policiales en el marco de las manifestaciones.
De esta manera, la organización estudiantil podría concretar manifestaciones a modo de manifestar su descontento entre los días 6 y 7 de enero, mismos días de la PSU.
En esa línea, Aguilar dijo compartir el planteamiento de la coordinadora, pero descartó que cualquier protesta vaya a afectar de manera negativa a los estudiantes que rindan la prueba a partir del lunes. “Coincidimos en la crítica con ACES, tienen todo el derecho a manifestarse”, dijo.
Además, aseveró que tales manifestaciones son válidas y que el Cruch debería allanarse a cambiar la PSU, para que no solo mida cobertura curricular, lo que no ocurre a cabalidad en escuelas más vulnerables por ausentismo, ritmos de aprendizaje y realidades propias, algo que extendió a los contextos de establecimientos técnicos profesionales.
Mecanismo
Consultado en el citado medio por cuál sería el mejor mecanismo de admisión para las universidades, Aguilar no entró en mayores detalles, pero sí afirmó que cree que se debe mantener una sola forma y que la PAA, como mecanismo, fue mucho mejor que lo alcanzado en todos estos años por la PSU.
“Bueno, a mí me parece primero que por la excesiva fragmentación que tiene el sistema universitario, una de las pocas cosas que le otorga cierta unicidad, cierta integración, es el hecho que haya un solo sistema de admisión universitaria”, señaló.
“Me parece que debería tratar de mantenerse un sistema y no que cada universidad hiciera lo que quisiera, porque pesarían mucho más otros factores, podría ser muy desventajoso para los estudiantes más pobres”, avizoró.
“Lo que hay en Chile es una experiencia histórica que es bastante mejor que lo que fue la PSU, que es la PAA. La PAA medía habilidades, medía básicamente potencialidades de los estudiantes más que conocimiento puro y, por lo tanto, era mucho más justa”, aseguró Aguilar.
“Un estudiante a lo mejor estaba en un colegio que no tenía gran cobertura curricular, pero si tenía determinadas habilidades efectivamente eso lo podía reflejar en un buen resultado en la PAA, porque era de aptitud académica, no de conocimientos”, sostuvo el líder de los profesores.
Así, el dirigente propuso que se considere más la trayectoria durante la Educación Media y destacó iniciativas como el ingreso especial vía Propedéutico de la Universidad de Santiago, una política de inclusión social de alumnos “talentosos” que por razones ajenas a sus capacidades no ingresan a la universidad y donde son preparados para estudios superiores con buenos resultados.
“La PSU no es un buen predictor de buen comportamiento académico en los estudios superiores. No hay una correlación muy buena entre alto rendimiento en PSU y rendimiento académico en la trayectoria universitaria. Por lo tanto, hay experiencia acumulada en el país que permitiría de todas maneras establecer un sistema de admisión universitario mucho más justo”, finalizó.