Chile cayó ante Uruguay. La Roja no pudo ante el combinado charrúa y terminó perdiendo por la mínima, en duelo válido por la tercera fecha de la fase de grupos de la Copa América 2019.
Sin embargo, un detalle no pasó inadvertido durante el encuentro. A los 73 minutos un hincha, con una máscara de gallina, saltó a la cancha e interrumpió el partido, incluso dándole un manotazo al balón.
Su aventura, sin embargo, terminó cuando se encontró con Gonzalo Jara. El defensa chileno le ‘tiró’ una patada al invasor, provocando su caída y que el fanático fuera detenido por personal de seguridad.
Esta acción fue considerada violenta por los jugadores uruguayos, quienes pidieron la expulsión del jugador de Estudiantes de La Plata, y lo criticaron una vez terminado el encuentro.
Es por lo anterior, que Jara arriesga una sanción de parte de la Conmebol. El Comité de Disciplina del ente rector del balompié sudamericano podría actuar de oficio frente al jugador, debido a que el reglamento y habla de sanciones ante una agresión hacia “cualquier persona presente en el partido”.
Sin embargo, el exjugador de Universidad de Chile recibió una inesperada y férrea defensa. Se trata del otrora árbitro argentino Javier Castrilli, quien a través de Twitter aseguró que lo hecho por Jara no debiese ser castigado, sino que aplaudido.
“¡Correcto Jara! Poniéndole la pierna para hacerlo caer al intruso y colaborando con el personal de seguridad que había fallado en la prevención. Actitud en defensa propia del juego, jamás expulsión”, publicó el exjuez.
“El contenido simbólico de la acción de Jara es loable. El compromiso con la realidad para combatir el delito. La colaboración con autoridades contra quienes se manejan fuera de la ley. ¡Muy bien Jara! Hay que aplaudirlo, no criticarlo”, añadió Castrilli.
Luego, el actual panelista deportivo indicó que “decir que Jara debió ser expulsado es tener una mirada tan superficial como reduccionista y lineal de la realidad. Jara se involucró con el problema para solucionarlo. Algunos dirán que no es su función. Los mismos que miran a otro lado cuando te están robando. ¿Y si el invasor estaba armado?”.
“El día que las sociedades enfermas entiendan que esto es atentar contra la seguridad y es un delito… no atacarán más a los jugadores que se manifiesten en contra, ni defenderán más a los ‘pobres’ intrusos. Mientras tanto, seguirán sufriendo la violencia en el fútbol”, sentenció el otrora árbitro trasandino.