Jean Todt, otrora presidente de la Federación Internacional del Automóvil (FIA), es una de las pocas personas que puede visitar al expiloto alemán Michael Schumacher.

El también exjefe de Ferrari se refirió a su relación con el ‘Kaiser’ y las visitas que le hace de manera frecuente desde que sufriera el trágico accidente de esquí hace ya más de 10 años.

Tras lo sucedido con el heptacampeón del mundo de Fórmula 1, su familia ha decidido mantener un férreo silencio sobre su estado, lo que ha generado especulaciones y un intenso interés por parte de los seguidores de la Fórmula 1.

“Lo veo regularmente y con cariño, a él y a su familia. Nuestro vínculo va más allá del trabajo pasado. Es parte de mi vida, que hoy está muy alejada de la Fórmula 1”, indicó de entrada Todt en entrevista con el diario italiano La Repubblica.

Frente a la insistencia de los medios y de los fanáticos de la máxima categoría del automovilismo por conocer la condición actual de ‘Schumi’, el jefe de la escudería de Maranello durante la era en que el alemán dominó la F1 dijo que “la familia ha decidido no responder a la pregunta (sobre el estadio de Michael), una elección que respeto”.

De esta forma, Todt apoya completamente la decisión tomada por Corinna, esposa de Schumacher, y los hijos del piloto germano.

El último detalle sobre el estado de Schumacher se conoció en diciembre pasado, durante el juicio por el chantaje a la familia del expiloto de 56 años. Entonces se reveló que ‘Schumi’ está “parcialmente indefenso, necesitado de cuidados y visiblemente marcado por sus heridas“.