Hans Loosli (Canal 9) | Archivo Agencia UNO

Viernes 10 mayo de 2024 | 12:11

Bío Bío se juega todas sus cartas para tener WRC en Chile hasta 2026: viaje y reuniones en Portugal

Por Pablo Velozo
Con información de Hans Loosli.

Hans Loosli (Canal 9) | Archivo Agencia UNO

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Una comitiva, encabezada por Felipe Horta y el Gobernador del Bío Bío, Rodrigo Díaz, se reunió en Portugal con directivos del WRC para negociar la extensión del contrato por dos años más, tras recibir elogios en ediciones anteriores. Ahora, solo queda esperar la respuesta oficial.

El paso del WRC, la competencia rally más importante del Mundo, se ha ido convirtiendo en un panorama imperdible en la región del Bío Bío, en Chile.

De hecho, en septiembre próximo, los motores volverán a rugir en Concepción y sus alrededores, con la presencia de los mejores pilotos del panorama.

La actividad ha fomentado con éxito el turismo y el deporte en la zona, con miles viajando desde distintos puntos para disfrutar del veloz y ‘extremo’ paso de los coches por los caminos de la zona.

Por lo mismo, en Bío Bío se ilusionan con extender la presencia de la actividad y ya negocian para extender la licencia hasta, al menos, 2026.

El viaje a Portugal: las reuniones claves

Prueba de que Chile y Bío Bío quieren continuar con su relación con WRC es el viaje a Portugal que realizan por estos días una comitiva encabezada por Felipe Horta, productor de RallyMobil, y el Gobernador Rodrigo Díaz, junto a consejeras regionales.

En medio de la actual fecha que se disputa en suelo luso, la quinta de la temporada, la delegación nacional se reunió con Simón Larkin (director del WRC), Jona Siebel (CEO de la WRC) y Peter Thul (director deportivo del WRC).

Durante la cita, que se realizó en muy buenos términos, Horta y Díaz confirmaron el interés de ampliar el contrato con WRC por dos años más. Ahora, solo falta esperar la respuesta oficial.

Hay que destacar que Chile solo ha recibido elogios en las pasadas versiones de la competencia, tanto de pilotos como de directivos. Por ende, la ilusión de recibir un “sí” es grande y justificable.