El piloto monegasco Charles Leclerc (Ferrari) avisó este viernes al neerlandés Max Verstappen (Red Bull) del nivel de su Ferrari al liderar la tercera y última jornada de test en el circuito de Sakhir, en Bahréin.
Leclerc, con un tiempo de 1 minuto, 30 segundos y 322 milésimas, superó a Verstappen, cuarto, pero también al español Fernando Alonso (Aston Martin), octavo a 8 décimas, al español Carlos Sainz (Ferrari), noveno a 9, y al mexicano Sergio Pérez (Red Bull), décimo a 1,1 segundos.
De hecho, Leclerc, Verstappen y el británico George Russell (Mercedes) fueron los únicos que optaron por montar un neumático blando y probar el coche en una vuelta rápida real con el objetivo de prepararse para el Gran Premio de Bahréin de la próxima semana, con el que dará comienzo la temporada de Fórmula 1.
La clave de la sesión estuvo en las simulaciones de carrera, donde el monegasco de la escudería Ferrari también exhibió un gran ritmo con el que, parece, podría dar guerra al neerlandés, que durante los últimos años ha estado intratable al mando del monoplaza de Red Bull.
Tampoco le fue mal a Alonso, que perdía dos décimas de media con Verstappen por vuelta con una goma C3, que apenas degradaba.
El asturiano también probó el neumático más duro -C1- antes de volverse a boxes, en una jornada en la que rodó 75 vueltas, mientras que el británico Lewis Hamilton (Mercedes), plusmarquista histórico de victorias (103) en la Fórmula 1, apenas dio 49 giros y terminó décimo segundo.
Una alcantarilla alteró los planes
Como ocurriera en la jornada del jueves, este viernes también tuvieron que detenerse los test de pretemporada en Bahréin debido a una tapa de alcantarilla mal sellada, un contratiempo que parece habitual en los últimos tiempos en la Fórmula 1, ya que ocurrió también durante los entrenamientos libres del Gran Premio de Las Vegas de la pasada temporada.
En esta ocasión, la sesión se detuvo durante una hora y cuarto y, para compensar, la organización suprimió el descanso de una hora entre la jornada matutina y vespertina para que así los equipos no perdieran tiempo de rodaje en pista en el último de los tres días de pruebas en el desierto, donde la próxima semana arranca la temporada 2024.
El problema de la tapa de alcantarilla en la curva 11 alteró el programa, tras solo 28 minutos en pista, pero, pese a ello, ese tiempo le sirvió a Sainz para para llevar a cabo dos simulaciones de clasificación y marcar el mejor tiempo de la mañana, un 1’31″247.
No obstante, el mejor tiempo de Sainz, que ya quedó primero en la jornada de este jueves, estuvo finalmente alejado del mejor tiempo de su compañero, Leclerc, que sí exprimió su monoplaza.
De hecho, sólo Hamilton intentó durante la mañana la simulación real de calificación, pero se pasó de frenada en la primera curva y su tiempo no fue relevante, mientras que Pérez fue el encargado de realizar las tandas largas de Red Bull para facilitar así la recogida de datos.