Durante años en Chile ha existido una duda razonable de cómo organizaciones sin fines de lucro logran sobrevivir. Sin ir más lejos, lo que es un secreto a voces se traduce en la aparición de financiamientos privados que muchas ONG’s reciben. Estos aportes, provenientes de empresas y personas naturales, han sido una fuente crucial de sustento para diversas organizaciones.
Sin embargo, la falta de transparencia en el origen y destino de estos fondos ha generado interrogantes y ha alimentado la necesidad de regular esta situación. En respuesta a esta problemática, el diputado por Aysén, Miguel Ángel Calisto, ha presentado un proyecto que busca obligar a las ONG’s a hacer públicos los aportes privados que reciben. En otras palabras, decir quién y de dónde viene la plata.
Para esto, en enero pasado, el diputado Calisto, ingresó un proyecto de ley que establece la obligación a las organizaciones no gubernamentales de transparentar sus ingresos y mecanismo de financiamiento.
Propuesta legislativa que adquirió mayor relevancia luego del revuelo nacional producido por el caso de la fundación Democracia Viva y los traspasos de diferentes entidades estatales a organizaciones sin fines de lucro.
En conversación con la Unidad de Investigación de Radio Bío Bío el diputado indicó que él ingresó el proyecto por “los ruidos que generaba la participación de las ONG en distintas comisiones del Congreso”.
Y que particularmente lo hizo a propósito del “fuerte lobby ambientalista en la tramitación de proyectos que tienen que ver con la pesca. Soy diputado de la región de Aysén y evidentemente en este contexto, me parece muy raro que muchas organizaciones ambientalistas intervengan, opinen, influyan en la sociedad civil y muchas veces no sepamos quienes realmente son. Perfectamente pueden ser los competidores de Chile de salmón de Noruega o las pesquerías de otros países que quieren influir y desintegrar la pesquería chilena. Creo que era importante saber”.
Hace tres semanas la propuesta del diputado Calisto fue aprobada por unanimidad en la comisión de Gobierno interior y hoy está a la espera de entrar en la tabla para ser votada en la sala de la Cámara de Diputados.
-¿Qué dice el proyecto?
Hicimos una modificación de la ley 20.500 sobre organizaciones sociales y la 20.730 que regula el lobby y los gestores de interés de las ONG. La idea es transparentar los ingresos y los mecanismos de financiamiento y la obligatoriedad que estas ONG tengan que informar para que la ciudadanía sepa quienes están detrás, quienes son las personas que esconden las ONG, que se pintan con una cara pública más bien afable, más bien cerana a los intereses ciudadanos pero que muchas veces esconde intereses económicos de muchos privados.
-¿Cuál es el mensaje detrás del proyecto?
Es una manera de decirle al país que no tenemos nada que esconder. Y por eso es fundamental que se ponga en discusión, ojalá esta semana, porque ahí vamos a saber finalmente cuál es la posición que tienen los parlamentarios respecto de si realmente queremos transparencia o queremos defender a nuestros colegas o queremos defender a nuestro colega de partido. Una cosa es decirlo en palabras y otra cosa es demostrarlo a través de leyes que sean implacables respecto de la transparencia y que garanticen credibilidad al accionar político.
-¿Por qué el proyecto habla solo de las ONG?
Estas son organizaciones que tienen una influencia muy fuerte en las comunidades. Influye mucho la opinión de una ONG en la tramitación de un proyecto de ley, muchas veces representan intereses que son loables, no hay que satanizar tampoco el lobby ni el accionar que ejercen muchas organizaciones. Pero para que se exprese de manera libre y transparente necesitamos saber quiénes están detrás, quienes financian, cómo administran la plata pública, etc.
-¿Qué más se establece en la propuesta?
Las ONG deberán proporcionar una copia de la información ingresada al registro nacional de personas jurídicas sin fines de lucro. Por ejemplo, si una organización pide una entrevista a un parlamentario o alguna institución a través de la ley de lobby deberá registrarse. Pero también tendrá que registrar quiénes son los que financian esta ONG. Si no lo hacen, entonces la información requerida por parte de la organización podrá ser denegada porque carece de los elementos de transparencia.
-En pocas palabras…
Lo que estamos haciendo es que una ONG para poder funcionar, operar, en todas las acciones de la sociedad civil, en las entrevistas en el parlamento, tendrá que revelar quienes son sus financistas.
Fundaciones y Corporaciones
Luego de lo ocurrido en las últimas semanas, Calisto en conjunto con la diputada Joanna Perez (DC) ingresaron un segundo proyecto, similar al de las organizaciones no gubernamentales pero esta vez dirigido a las fundaciones y las corporaciones.
– ¿Sería bueno ampliar esta propuesta de ley a las fundaciones?
A propósito de la contingencia lo que hicimos junto a la diputada Joanna Pérez fue ampliar la figura y hacerlo exigible no solamente para las ONG sino que también para las fundaciones y corporaciones. Las integramos en un nuevo proyecto que hoy día está en la comisión de Gobierno, que se va a iniciar la tramitación la próxima semana para garantizar que la transparencia no se de solamente para las ONG sino que también para las fundaciones y corporaciones
-¿Estos proyectos se unirán en algún minuto o se votarán por separado?
Los proyectos van por caminos separados porque el proyecto de ONG ya se aprobó de manera unánime en la comisión de Gobierno Interior. Ya está listo para ingresar a la sala. El proyecto de fundaciones y corporaciones que atienden a lo mismo va comenzar la discusión en la comisión. Va un poquito más atrasado pero perfectamente pueden caminar juntos al Senado, que es lo que esperamos nosotros que transcurra lo antes posible. Entendiendo además las señales que debe dar el Congreso a propósito de los incidentes y hechos que han ocurrido.
-Para usted qué tan rápido deben avanzar estos proyectos ¿Cuál es la señal que debe dar el Congreso?
Lamentablemente he visto, y por parte de la mesa, se ha priorizado no con la celeridad y urgencia que nosotros hemos pedido. El proyecto de ONG fue aprobado en la comisión de Gobierno hace ya casi tres semanas y desde ese mismo momento pedí en la reunión de comité y al presidente de la Cámara, que se le de celeridad en la tramitación y que se ponga en tabla en la sala.
-¿Qué respuesta obtuvo?
Hasta el minuto lamentablemente eso no ha ocurrido, espero que este en tabla para esta semana, tomando en cuenta la urgencia que requiere porque el Congreso debe dar señales absolutas de transparencia y garantizar que la ciudadanía sepa quienes financian las ONG, las fundaciones y corporaciones. La transparencia es fundamental para que efectivamente la ciudadanía sepa quiénes están detrás de aquellos que se “cubren” con nombres a través de las fundaciones y se hacen representantes de las necesidades sociales de la comunidad pero muchas veces de intereses económicos detrás. Tal cuál como se ha pedido transparencia en la política, porque hoy día los parlamentarios estamos sujetos a todos los niveles de transparencia, de las propiedades, de los bienes, las vinculaciones con organizaciones, entonces de la misma manera entonces se tiene que dar respecto de las ONG, fundaciones y corporaciones. Y eso es lo que buscan los dos proyectos.
-¿Por qué cree que la mesa no lo ha puesto en tabla?
Espero que la mesa de la Cámara en sus últimas semanas tome una decisión y pueda integrar el proyecto de ONG. Es fundamental porque es una señal que debe dar el Congreso respecto que nosotros no amparamos este tipo de prácticas. Esa es la manera concreta como la Cámara de Diputados debe decir al país que nosotros condenamos los actos en los cuales se han visto involucrados la fundación Democracia Viva y todas las fundaciones y organizaciones en las cuales han estado integradas por acciones políticas, de partidos políticos, que claramente atentan contra la fe pública, atentan contra la credibilidad del accionar político y que lamentablemente producto de estos hechos todos los políticos nos vemos finalmente involucrados y cuestionados por parte de la ciudadanía. Y con justa razón.
Democracia Viva
-¿Cuál es su opinión respecto a los últimos antecedentes en relación al traspaso de dinero a fundaciones?
Durante mucho tiempo existía la duda respecto de cómo se manejaban las fundaciones, las ONG y todo tipo de organización que muchas veces tiene una mirada desde la opinión pública como una organización no gubernamental, sin fines de lucro, las que inciden de manera decisiva en distintas acciones de la sociedad civil. Incluso es más, tienden a ser factores y promotores importantes que generen cambios en muchas políticas públicas, en muchas leyes que se discuten en el Congreso. Lo que ha generado la situación de la fundación Democracia Viva, los vínculos políticos que tenía con Revolución Democrática, con algunos parlamentarios. Es un reflejo de un mal manejo y sobre todo de un espacio donde hay muchas dudas respecto de su funcionamiento.
-¿Pero es ilegal lo que hicieron?
Creo que están al filo de la legalidad porque claro puntualmente no infringen ninguna ley hoy día pero si sabemos que hay tráfico de influencia, sabemos que no hay claridad del manejo de los recursos que se entregan y que se administran ahí, que mucho de ellos como han quedado en exposición, producto de Democracia Viva, son recursos públicos.
-Para usted ¿qué tan grave es lo que sucedió?
Acá se infringió la ética respecto de cómo se garantiza la relación entre la ciudadanía y las organizaciones no gubernamentales que administran recursos públicos. También aquí se puede corroborar y comprobar delitos porque está en proceso de investigación por parte de la fiscalía. ¿Qué ocurre por ejemplo si en el caso de la diputada Catalina Pérez existen transferencias de recursos desde integrantes de la fundación? Esta puede ser una situación mucho más compleja. Por eso la fiscalía es quien tiene que investigar detalladamente qué es lo que ocurre respecto de los fondos, de la administración de los fondos, donde fueron a parar los recursos. Por eso me imagino que el fiscal hará una apertura de cuentas corrientes como corresponde para saber cuál fue la destinación de los recursos que administró esta fundación Democracia Viva y particularmente donde fueron a parar y sobre todo que hayan sido destinados a la gente y no a fines particulares o fines políticos como se ha comunicado las últimas semanas.
-¿Fuimos inocentes al no pedir la misma transparencia que se exige al Estado y políticos?
Creo que las ONG, las corporaciones, las fundaciones durante muchos años han funcionado sin ningún tipo de exigencias ni regulación. Tal cual como dice el dicho: el que nada hace, nada teme, es fundamental que transparenten en qué gastan los recursos, que transparenten quienes están detrás en el financiamiento de estas organizaciones porque hay que recordar que no todas las fundaciones administran platas privadas, muchas de estas, una gran parte funcionan con dineros públicos y si le exigimos a un ministerio, a un parlamentario, a un concejal, a un alcalde, que deben rendir, que tienen que transparentar sus ingresos, ¿Por qué no las ONG? ¿Por qué no las fundaciones y corporaciones?