Edición: Jaime Silva

Jorge Burgos defiende a Siches: Representó a un gobierno que entró confuso en seguridad pública

08 septiembre 2022 | 11:03

El exministro del Interior Jorge Burgos sale en defensa de Izkia Siches, quien este martes dejó dicha cartera para dar paso a Carolina Tohá. Si bien admite que la médico cometió ciertos errores, afirma que sería injusto culparla exclusivamente a ella, aduciendo que el actual gobierno asumió de manera "confusa" en materia de seguridad. Por su parte, sostiene que hubo desprolijidad tras el polémico y fallido nombramiento de Nicolás Cataldo en la Subsecretaría del Interior.

Fue en enero de 2022 cuando Jorge Burgos señaló que el Ministerio del Interior era una “moledora de carne”. Esto, por lo complejo que significa su manejo. Por lo mismo, apunta hoy el exparlamentario, es esencial separar las funciones en la cartera para así crear un Ministerio de Seguridad.

En cuanto a las críticas que recibió Siches por su gestión, el ex secretario de Estado indica a BioBioChile que si bien hubo responsabilidades de la expresidenta del Colegio Médico, añade que ella representó a un gobierno “que entró absolutamente confuso en materia de seguridad pública y particularmente de orden publico”.

Por su parte, el exministro del Interior durante el segundo gobierno de Michelle Bachelet dice que si bien la oposición ha sido dura con la administración Boric, lo mismo ocurrió cuando el Frente Amplio fue oposición durante el gobierno de Sebastián Piñera.

En tanto, el abogado destaca el nombramiento como ministra del Interior a Carolina Tohá, con quien ha trabajado en el pasado. Sobre esta responsabilidad menciona: “Espero, por el bien de Chile, que sea exitoso”.

“Moledora de carne”

-Usted advirtió a Izkia Siches, en este mismo espacio, que el Ministerio del Interior era una “moledora de carne”.

Más que una advertencia a una persona determinada, lo que yo pretendí señalar con esa frase, que fue mal tomada por alguna gente, era que el Ministerio del Interior y de Seguridad Pública, tal como está diseñado actualmente, es un ministerio en el que quien lo conduzca debe dedicar el total del tiempo o prácticamente el total del tiempo a la seguridad pública. Pretender que coetáneamente se haga la jefatura política es muy difícil.

Y creo que desde esa perspectiva es que se produce esa frase, que es bastante real desde el punto de vista de lo que ocurre actualmente. Por eso, es tan importante que de una vez por todas se tramite un proyecto de ley que separe la función y así crear un Ministerio de Seguridad, para que así el Ministerio del Interior o cómo termine llamándose, quede con la coordinación y jefatura política del gabinete. Mientras eso no ocurra, la situación es bien compleja.

-¿Para usted fue un error que no se impulsara precisamente este proyecto de ley para separar las funciones en el Interior?

Sí, yo creo que es un error, pero no un error sólo endosable al actual gobierno. Es un tema que está en discusión en distintos grados desde hace una década. Incluso, cuando al Ministerio del Interior se le agregó la función de seguridad pública ya definitivamente, porque antes ya la tenía de hecho, pero cuando la tuvo de derecho, que es una ley de 2011, en esa oportunidad yo era parlamentario y trabajé en esa comisión, se discutió por qué no en ese momento tomábamos la decisión y no se hizo. Y después todos los gobiernos han anunciado o han mandado proyectos, entiendo que ahora el gobierno envió un proyecto que está en trámite en el Senado y ha avanzado algo. Ojalá esta sea la oportunidad porque realmente es indispensable.

Gestión de Izkia Siches

-¿Qué mirada tiene de estos seis meses de la exministra Siches en líneas generales?

No hay duda que fue una gestión compleja, al punto que el Presidente de la República determinó hace algunos días cambiarla. Eso, obviamente, obedeció a que había un juicio negativo respecto a lo que había sido la conducción en el Ministerio del Interior y Seguridad Pública. Si no, no se explicaría su salida. Salvo que una persona renuncie por distintas razones, si sale porque se le pide la renuncia es porque obviamente hay una evaluación negativa de la conducción.

Ahora, creo que sería injusto culpar de eso exclusivamente a la exministra. Creo que ella representó a un gobierno que entró absolutamente confuso en materia de seguridad pública y particularmente de orden publico. Por dar un ejemplo, cuando la exministra viaja, intempestivamente o sorpresivamente, a los pocos días de ejercer a Temucuicui, con una intención de diálogo poco trabajada y que terminó en lo que terminó, no fue sólo responsabilidad de la ministra sino que fue una táctica errónea del gobierno que fue acompañada al inicio con declaraciones y decisiones de, por ejemplo, terminar el estado de emergencia. Con declaraciones que había hecho que no eran necesariamente delictuales o comunes sino que podían ser hechos de carácter político, con declaraciones de no militarizar el Wallmapu, con declaraciones que indicaban que había una cierta comprensión a ciertos ilícitos porque tenían causalidades que parecían respetables.

Eso es una llegada equivocada del gobierno y le tocó representarla a ella, pero no es exclusivamente su responsabilidad. También en materia de inmigración tenían poca claridad de lo que hacer, fueron cambiando con los días pero fue una cosa que responde a una confusión gubernamental, no sólo una confusión en el Interior.

-Pero, en paralelo a eso, ¿no cree que quizás hubo demasiados errores no forzados de la exministra Siches y eso le terminó por pasar la cuenta?

Indudablemente hubo varias veces en las que se cometieron errores públicos y comunicacionales que obviamente después trataron de rectificar o pidiendo las debidas disculpas. Pero obviamente esa trazabilidad de errores fue complicando su gestión y como te decía al comienzo, en un régimen presidencial quien evalúa la conducta de su gabinete y quien nombra a los ministros es el Presidente de la República. Más allá de los cariños, amistad o cercanía que pueda tener con un ministro, cuando toma la decisión de pedirle la renuncia, de sacarlo, es porque hay una evaluación negativa.

Rol de la oposición

-¿La oposición fue demasiado dura con la exministra Siches?

Obviamente la oposición más de derecha es bastante dura con los errores. Desgraciadamente está pasando una cosa en Chile: quienes están en las oposiciones más duras responden fundamentalmente a eso y no suelen mirar las cosas con un poquito más de generosidad.

En muchas declaraciones los sectores más duros, en materia de seguridad sobre todo, están respondiendo con la misma moneda que los que hoy día son gobierno hicieron cuando eran oposición. Cuando el Frente Amplio era oposición de la derecha que gobernó fue inmisericorde y ahora muchas veces esa misma oposición es también inmisericorde.

-¿Hubo aspectos o gestos a destacar durante su gestión?

Sí, yo creo que ella es una persona muy joven que seguramente va a tener nuevas funciones, no sé si gubernamentales o en el área gremial. Yo creo que ella es una persona bien intencionada, no tengo dudas de que cometió errores pero creo que fueron errores probablemente por cierto desconocimiento del área y por formar parte de un gobierno muy confuso en estas materias, o que se inició muy confuso. Y tenía también muchas veces la voluntad rápida de pedir disculpas, lo cual también debe reconocerse yo creo.

Nombramiento de Carolina Tohá

-¿Qué le parece el nombramiento de la nueva ministra del Interior, Carolina Tohá?

A mí me parece una buena decisión. Yo conozco a la ministra Tohá desde hace años. Me tocó trabajar cerca de ella, éramos parlamentarios e hicimos muchas veces cosas juntos, formábamos parte de la misma coalición. Después me tocó conocerla como ministro, fue una muy buena ministro vocero. Luego, cuando yo fui ministro del Interior, ella fue alcaldesa de Santiago y trabajamos temas de seguridad juntos.

Yo creo que es una persona inteligente, tiene muchas redes políticas, es conocida. En fin, ojalá le vaya muy bien. Vuelvo a insistir, está en un ministerio difícil donde la seguridad le va a tomar mucho tiempo y la articulación política también. Es un desafío importante y yo espero, por el bien de Chile, que sea exitoso.

Fallido nombramiento de Nicolás Cataldo

-Sobre lo ocurrido con el fallido nombramiento de Nicolás Cataldo como subsecretario del Interior debido a sus tuits, ¿hubo cierta desprolijidad o improvisación en dicho cambio de gabinete?

Sin duda hubo un desacierto. El gobierno había tomado la decisión de nombrarlo porque consideraba que lo podía hacer bien y cuando se hace pública su historia tuitera, que es una historia que yo creo que hay que revisarla siempre porque Twitter se ha convertido en un medio para dar opiniones y que queda registrado, ese trabajo no se hizo probablemente.

Si antes de nombrarlo el encargado de hacer los chequeos hubiese dicho “mira, tenemos este problema, él se ha expresado de manera durísima”, lo habrían evitado. Obviamente que hubo una desprolijidad.