Este fin de semana recién pasado miles de personas se movilizaron a los centros de votación para dejar todo listo para las elecciones en las que se votó por gobernadores regionales, alcaldes, consejeros regionales y concejales. Es así como la madrugada del sábado un par de vocales de mesa asistieron al recinto ubicado en Carretera General San Martín #765 para constituir la mesa 275 en el gimnasio interior de la cárcel Colina II, donde tendrían la posibilidad de votar 87 personas, entre presos y funcionarios de Gendarmería.
Este fue uno de los 19 locales de votación en centros penitenciarios que se habilitaron este 26 y 27 de septiembre para las elecciones municipales y regionales, acudiendo a las urnas carcelarias 795 personas a lo largo de once regiones.
La cifra corresponde a solo un 1,4% de la población penal, en un universo de 61.131 presos a nivel nacional, al no cumplir la gran mayoría con los requisitos establecidos en la Constitución de la República, que dicta que solo a aquellas personas condenadas o acusadas por delitos que merezcan pena aflictiva (desde tres años y un día) se les suspende el derecho a sufragio.
Leandro Pincheira Millar, Subdirector Operativo de Gendarmería de Chile, realizó la mañana del sábado una visita inspectiva a distintas unidades penales de la Región Metropolitana, y afirmó que “a nivel país, el proceso se ha llevado a cabo sin ningún inconveniente, en ese sentido, destacar la gran labor que han desarrollado nuestras funcionarias y funcionarios, y el compromiso que demuestran, para garantizar el derecho de quienes están habilitados para sufragar en estos locales de votación”.
Al igual que con el resto de los locales del país, el Servicio Electoral de Chile (SERVEL) reunió la información sobre la participación y los resultados en cada una de las cárceles de Chile en las que se votó. Los detalles a continuación.
Participación
Fue el 2016 cuando el Instituto Nacional de Derechos Humanos (INDH) presentó los primeros recursos de protección para la instalación de mesas electorales en centros de privación electoral, en donde se mantenían personas con derecho a sufragio pero sin el acceso para hacerlo. Así, por primera vez en la historia del país, se logró la participación de la población penal en un proceso electoral en el plebiscito constitucional del 4 de septiembre de 2022. En esa ocasión se emitieron 772 votos.
De acuerdo al padrón electoral, para este fin de semana 1.200 personas dentro de centros penitenciarios podían votar, siendo 330 de ellos funcionarios de la institución que estarían cumpliendo sus funciones.
Sin embargo, un 67,37% del padrón asistió definitivamente a votar, en una elección que tanto dentro como fuera de las rejas, era obligatoria, cifra contrastante con el 82,33% de los habilitados a votar a nivel nacional que acudieron a depositar sus papeletas. En concreto, dentro de las cárceles, votaron 795 personas, estando la mayor parte de los votantes repartidos en las regiones Metropolitana, Antofagasta y Tarapacá, e informándose de las campañas políticas principalmente mediante los televisores autorizados por las jefaturas.
Con multiplicidad de posibles factores sobre la baja participación, desde Gendarmería aclararon en un comunicado público que “los electores que hayan obtenido su libertad o hayan sido trasladados de establecimiento, pueden ingresar a votar al recinto, en los horarios determinados por el Servicio Electoral”.
Resultados
Comparando los resultados de elección de gobernadores de las 19 mesas dispuestas en el país, el Partido Republicano (PR) llevó la delantera, con 111 votos hacia candidatos que se presentaron por el pacto Republicanos e Independientes. De hecho, ningún centro tuvo una mayoría cercana al oficialismo.
Por ejemplo, la cárcel de Alto Hospicio, único centro penitenciario en Tarapacá que funcionó como local de votación, asistieron a las urnas 91 personas. Por el puesto de GORE, la mayoría –21 personas– votaron por Jorge Muñoz Oyarce (PR), 17 por Cristian Cabezas Mundaca (Partido Social Cristiano) y 16 por José Miguel Carvajal Gallardo –independiente que salió reelecto por el pacto oficialista–, con porcentajes menores distribuidos en otros candidatos.
Misma inclinación se repitió más al sur, en el Complejo Penitenciario de Valdivia, en el cual, de los 33 votos válidamente emitidos, el 36,4% se fueron a la candidata republicana Carolina Zúñiga Brito.
Así, se repite una propensión por candidatos del pacto Republicanos e Independientes en diez de los locales, seguido por tres cárceles en las que se impuso el Partido Social Cristiano.
En el tercer lugar de preferencia empataron cuatro locales en la Región Metropolitana: con el Centro de Detención Preventiva Santiago Sur (ex penitenciaría) y Colina II habiendo preferido a Francisco Orrego Gutiérrez, la opción de Renovación Nacional, y paralelamente Santiago I y la cárcel de Puente Alto, votando por el independiente Claudio Orrego Larraín, ambos quienes se disputarán la gobernación el próximo domingo 24 de noviembre.
Es así como la única otra cárcel en que la aguja alejó más de la oposición fue en el Centro de Cumplimiento Penitenciario de Antofagasta, en que el 27% de los votos para Gobernador Regional fueron otorgados a la exdiputada Marcela Hernando Pérez (Radical).
Una situación que se repitió tanto adentro como afuera de las cárceles, fue la alta cantidad de nulos y blancos, asociado principalmente a la obligatoriedad de las elecciones. A nivel país, en las elecciones por gobernador se identificaron 1.350.343 (10,30 %) nulos y 977.557 (7,45 %) votos blancos, siendo similar la situación tras las rejas, con 63 votos nulos, equivalentes al 7,9% y 97 blancos, que representaron el 12,2% de las papeletas de GORE.