Una “red de protección familiar” le permitió al condenado por violación, Agustín Felipe O’Ryan Soler (21), mantenerse prófugo de la justicia chilena por casi un año y medio. Eso, hasta que uno de los viajes de su mamá lo puso nuevamente en el radar de los investigadores.
Así, después de varios intentos fallidos por aprehenderlo, gracias a sospechosas maniobras evasivas, la Policía Federal Argentina (FDA) logró capturarlo este miércoles, en un sector rural apartado a unos 40 kilómetros de la ciudad de Córdoba.
Y si bien aún no está clara la fecha exacta en que el condenado traspasó la cordillera, lo cierto es que lo hizo de manera ilegal en una fecha posterior al 9 diciembre de 2022, día en que le comunicaron la sentencia de 7 años en su contra de forma telemática. La noticia la recibió conectado por videollamada a la audiencia, en teoría desde su casa, mientras se mantenía todavía bajo la medida cautelar de arresto domiciliario total.
En la oportunidad, el Tribunal de Juicio Oral en lo Penal de Curicó lo condenó por la violación F.S.G.C, de 16 años de edad, y por el abuso sexual agravado de M.B.B., de 15 años. Ambos hechos ocurridos en menos de una semana en fiestas de la ciudad maulina.
Visita de cumpleaños
Según información recopilada por BBCL Investiga, su huida al extranjero se concretó antes del 19 de abril de 2023, pues ese día se publicó una notificación roja de la Interpol, con la convicción de que estaba fuera de los límites chilenos. Eso, como consecuencia directa de sendos viajes realizados por familiares directos a Argentina. Su madre, María José Soler Marchant, salió desde Chile y su hermano desde Canadá, donde se encontraba estudiando, para visitarlo con motivo de su cumpleaños.
Sea como sea, todo apunta a que O’Ryan salió del país por un paso no habilitado. Posiblemente por la zona norte, considerando que registró pasos por Jujuy, una provincia trasandina ubicada al noroeste de Argentina a la altura de Antofagasta.
Desde ese mismo lugar, un desconocido -presumiblemente Agustín- habría intentado hackear la cuenta de Instagram de F., una de sus víctimas, según pudo conocer este medio.
Su detención no resultó cosa fácil. La fiscal que consiguió su sentencia y dedicó esfuerzos para encontrarlo, Carmen Gloria Manríquez, apuntó a la existencia de una verdadera “red de protección”, posiblemente coordinada por su familia en Chile. Eso le permitió hacer continuos cambios de ciudad en Argentina manteniendo un acomodado nivel de vida.
Precisamente, investigadores que trabajaron en su captura afirman que la red de protección que levantó su familia fue clave, pues se trataba de un joven que —pese a su mayoría de edad—, tenía “nula experiencia de vida” y era “imposible que fuera capaz de mantenerse solo” en el extranjero.
De acuerdo a fuentes de BBCL Investiga, fue ese mismo grupo de confianza el que le hacía llegar dinero a Argentina para poder desenvolverse sin mayores problemas. De hecho, hasta eventos benéficos se realizaron en el círculo acomodado de Curicó para apoyar su estadía, sostienen conocedores de la materia.
Un violador suelto en Argentina
En medio del complejo escenario para ubicarlo, las repetidas salidas del país de su mamá mantuvieron en alerta a las policías. Los mismos periplos fueron dejando pistas para los investigadores. Viajes a Brasil, Uruguay y a Argentina fueron seguidos de cerca por el equipo liderado por la fiscal Manríquez, hasta conseguir el objetivo: adelantarse a sus pasos y lograr su captura.
De acuerdo con lo informado por la persecutora especialista en delitos sexuales, la madre visitó a su hijo nuevamente durante las últimas semanas. También en fechas cercanas a su cumpleaños.
“Siempre hacía un recorrido para distraernos, pasando por distintos países para luego tomar un bus o un tren para llegar a Córdoba. Finalmente, la última vez que la seguimos logramos llegar a este domicilio”, contó la persecutora.
Tuvieron que moverse rápido. No era la primera vez que tenían definido el paradero de Agustín O’Ryan en Argentina y había temor de llegar tarde otra vez. En esta ocasión, las coordinaciones entre el Ministerio Público, los detectives chilenos, la Interpol y la Policía Federal Argentina rindió frutos.
“Conforme nuestras investigaciones, logramos entregarle los antecedentes suficientes al Grupo Operativo de Investigación de Prófugos de la Justicia de Interpol Buenos Aires, quienes, luego de un arduo trabajo que involucra el desarrollo de técnicas investigativas (…) y utilización de elementos tecnológicos que incluyen incluso drones, logran poder dar con su ubicación”, detalló el subprefecto Gerardo Raventós Miller de la Oficina Central Nacional de la Interpol Santiago, quien de paso destacó el trabajo de la Brigada Investigadora de Delitos Sexuales de Curicó y el de la Interpol de Buenos Aires.
Identidad de su gemelo
Eso sí, su captura estuvo cerca de fracasar. Se presume que algo o alguien había alertado al prófugo, quien —horas antes del operativo— tomó parte de sus pertenencias y abandonó el inmueble donde se ocultaba.
Era el mismo lugar donde recibió la visita de su mamá, una casa ubicada en Mendiolaza, una zona de parcelas y casonas de “gente muy acomodada”, según contó un miembro de la policía argentina a Chilevisión.
Pese a su último intento por mantenerse en la clandestinidad, los policías consiguieron capturarlo. Sabían que se movía bajo una identidad falsa: la de su hermano gemelo Joaquín Francisco O’Ryan Soler, el que estudia en Canadá. A nombre de este último, el condenado mantenía registrada una camioneta en la que se movía en territorio trasandino.
“Con la autorización judicial respectiva (los policías argentinos) rompieron el domicilio. No lo pudieron encontrar, pero como tenían una labor de inteligencia, establecieron que se encontraba en las proximidades”, explicó la fiscal.
Era fácil, pues según dice una fuente que conoció de cerca a ambos hermanos, “son idénticos, era obvio que se movería con los documentos de Joaquín”.
Por ello, el cotejo de las huellas dactilares fue clave. Todo fruto de la coordinación entre las policías chilenas y argentinas, al alero de la Interpol.
La misma fuente consultada da fe de que en medio de su arresto domiciliario, antes de su condena, Agustín incluso organizaba fiestas en su casa con la venia de sus padres.
“Sus cercanos siempre decían que Agustín no iba a ir a la cárcel”, añade.
Directo al penal
Por ahora, el condenado por violación y abuso de menores de edad se mantendrá en un recinto penitenciario argentino a la espera de que se termine de tramitar su extradición, la que ya está en proceso de ser solicitada por la justicia de nuestro país.
Se estima que el proceso podría tardar máximo 60 días, aunque las autoridades chilenas confían en que se demore menos que eso, sobre todo después que la ministra de Seguridad de Argentina, Patricia Bullrich se refiriera a Agustín O’Ryan como “el chacal chileno” y afirmara que será extraditado porque no son “refugio de delincuentes”.