—Al hombre le dimos cincuenta y tantos millones, lo mismo que todos. Quedó loco cuando le pasamos la plata. Dijo: “Oooh, yo pensé que no iban a hacerme la parte legal”. Pero nosotros somos de palabra, somos bandios pulentos. Le gustó al paco, sabe que con nosotros va a ganar.
Dos carabineros fueron detenidos esta madrugada, vinculados a una extensa red de asaltantes que protagonizó millonarios robos en la capital entre 2020 y 2021. ¿Las víctimas? Dos sucursales de la Caja de Compensación Los Héroes, una tienda de Movistar y una oficina de Afex. En uno de los atracos a la primera entidad financiera consiguieron un botín superior a los $900 millones en efectivo.
Los policías corresponden al suboficial Gabriel Vega Vergara y el cabo primero Jesús Parra Castillo. De acuerdo a la causa que lidera la Fiscalía Metropolitana Occidente, a ambos se les acusa de prestar cobertura a la banda liderada por Víctor Osses Mancilla y Rodrigo Troncoso Molina. El primero de ellos, alías El Guagüita, era quien mantenía contacto con los uniformados.
Los nexos entre ladrones y carabineros quedaron al descubierto en conversaciones telefónicas que hoy revela en exclusiva la Unidad de Investigación de BioBioChile.
Una cuñada parlanchina
Una de las primeras escuchas que alertaron del involucramiento de funcionarios de la institución verde oliva en los ilícitos no provino de alguien de la banda. Más bien de una familiar. Ocurrió el 23 de septiembre de 2020 cuando la cuñada del líder Víctor Eduardo Osses Mancilla se fue de lengua con quien -al parecer- sería un amigo.
Resulta que la mujer, sin sospecharlo, mantenía su teléfono intervenido por la PDI. En la charla, que se prolongó por unos quince minutos, contó todo lo que sabía de los movimientos de su cuñado, de quien se refiere por su segundo nombre.
—Cuñada: (En el asalto) andaban varios, porque todos hacían una pega diferente. Voh te cagai de la risa con los nombres que tienen. Está el Fibra…
—Amigo: El Fibra jajaja, ese debe ser flaco.
—Cuñada: Nooo, el Fibra es el que te corta las cámaras, está el Segurity y así vay sumando. Oye, pero esa hueá es tan turbia, porque ellos trabajan hasta con los pacos (…) Ellos le pagan a un paco turbio para que haga la pega como de distraer y que no lleguen a la solicitud de robo, cachai. Yo quedé con la boca abierta cuando entendí que habían pacos metidos, porque, suponte tú, estos sacan lo que sacan y los pacos reciben la media mascada po, solamente por ser los que cuiden que no lleguen hasta allá.
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“Al paco le gustó”
Según explica el fiscal del caso, Sergio Soto, jefe del Sistema de Análisis Criminal y Focos Investigativos (SACFI) Occidente, las pistas que dieron con Carabineros se dio precisamente porque los propios imputados “se jactaban que nunca los iban a detener, ya que actuaban coludidos con los funcionarios”.
A juicio del persecutor, los uniformados “estaban absolutamente fidelizados, porque (los asaltantes) les entregaban sumas de dineros en igual cantidad que a ellos les correspondía por los robos”.
La intervención de un segundo contacto telefónico por parte de la PDI confirma lo mencionado por el fiscal Soto. Tuvo lugar el 7 de octubre de 2020. ¿Los protagonistas? El segundo líder de la banda, Rodrigo Troncoso Molina, y su padre, quien estaba al tanto de los ilícitos de su hijo.
—El hueón (carabinero) es jefe de allá, de la comuna culiá de ahí al lado, podemos hacer lo que queramos estando con él, el huéon nos dio luz verde… Al hombre le dimos cincuenta y tantos millones, lo mismo que todos. Quedó loco cuando le pasamos la plata. Dijo: “Oooh, yo pensé que no iban a hacerme la parte legal”. Pero nosotros somos de palabra, somos bandios pulentos. Le gustó al paco, sabe que con nosotros va a ganar.
Su padre, desde el otro lado del teléfono aconseja a su hijo. No para que no siga delinquiendo, sino para que invierta el dinero de los atracos en bienes raíces.
—Tenís que dejarte comprado un departamentito, cosa que cualquier cosa tengai por último donde irte a dormir. Pa no andar tirao.
Rodrigo asiente:
—Yo me pegué la embarrá con gastarme todos los millones que tuve —dice.
Rápidamente cambia de tema, para sacar a relucir, orgulloso, el poder de fuego de su grupo:
—¿Hoy día sabís con cuántas pistolas andábamos? ¡Diez!
—¿Y vo andai con la hueá ahí? —retruca curioso su progenitor.
—La tengo guardá en la casa de mi compañero, porque estos días vamos a “trabajar”.
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En la patrulla
Según quedó establecido en la investigación, ambos funcionarios policiales eran los encargados de resguardar los alrededores de donde se perpetraban los asaltos.
De acuerdo a un informe al que accedió este medio, los carabineros aseguraban a la banda que mientras estuvieran en servicio, ningún policía podría frustrar los robos.
También daban aviso a los asaltantes si es que alguna alarma se activaba o posibles denuncias que pudieran recibirse en contra de algún integrante del grupo.
La revisión de cámaras pudo situar a ambos policías en las cercanías de los sitios del suceso al momento de los ilícitos, a bordo de una patrulla institucional.
De acuerdo al fiscal, a través de los videos, “se confirmó que efectivamente los carabineros cumplían esa labor de protección o contención en el momento en el que los sujetos robaban”.
“El paco se puede poner fome”
Con todo, en la banda había a quienes no les agradaba en lo absoluto la idea de trabajar con los “representantes de la ley”. Un día después de asaltar una tienda Movistar, desde donde huyeron con más de $40 millones en celulares, Rodrigo Troncoso se contactó con uno de sus cómplices, Hans Elphick Del Valle.
En la alocución, ambos deslizan la posibilidad de, sencillamente, no entregar parte del botín al carabinero involucrado. Es decir, el suboficial Gabriel Vega Vergara.
—Rodrigo: Sabís que en la bolsa del paco hay casi puro redmi, puros teléfonos culiaos baratos y como dos de alta gama.
—Hans: Entonces pásame esas hueás, hermano. Y era el paco culiao, por el pico. (…) Era nomás. Y el paco queda sin parte nomás po, terrible logi (…) El paco culiao no hizo nada hermano, ¿a ese hueón lo viste paseándose por afuera?
—Rodrigo: Nada, si yo estoy vivo, no hizo nada hermano. Porque el loco igual nos dio las patadas (alertó) que nos vio los autos hermano (…) ¿Sabí lo que está haciendo el paco ahora? No está haciendo lo mismo que en Los Héroes (robo anterior), el paco ahora nos dice ‘ya cabros están con patadas, salgan’, o ‘ya denle color nomás’, pero el loco no anda con la comisaría. Está terrible brígido.
Tras unos minutos, vuelven a reflexionar. Rodrigo toma la palabra:
—Te digo algo, estamos terrible grabados con los autos. Por esa pura huea no pudimos dejar caer al paco, porque el paco se puede poner fome y puede sapearnos y mandarnos en cana…
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Compras al contado
Los arrestados enfrentarán este miércoles su control de detención. Se espera que sean formalizados por robos reiterados, asociación ilícita, receptación, infracción a la ley de control de armas y lavado de activos.
El suboficial Vega enfrentará cargos por este último delito, al haber adquirido, con dinero proveniente presumiblemente de los robos, una camioneta al contado.
De acuerdo a la indagatoria, desembolsó casi $18 millones por una Ford Edge de 2020.
Con el mismo modo de pago se puso al día con sus deudas: canceló por dicho concepto otros $2,8 millones. Todo ello, pese a percibir un sueldo que bordea los $1,3 millones.
Los detalles se conocerán en profundidad durante la audiencia fijada para las 09:00 de mañana.