Hasta abril del 2021 podría extenderse la megasequía que afecta al país, y ante esta situación, los expertos llamaron a las autoridades a no dejar fuera de la agenda este tema.
Esto porque se estima que durante este año se registren fenómenos climáticos que podrían hacer escasear las lluvias a los niveles del año pasado.
La zona central del país arrastra una megasequía -denominada así por tener niveles inusuales de déficit de agua- desde el 2010 y el 2019 la situación se ha vuelto más crítica, en especial, considerando que para algunos expertos esta condición podría extenderse hasta por lo menos el primer trimestre del 2021.
Esto porque según las estimaciones meteorológicas, las lluvias se hacen improbables durante las próximas semanas, lo que se suma a la posibilidad de que este año se genere el fenómeno de La Niña, que hace más difícil la presencia de precipitaciones.
Patricio González, integrante del Centro de Investigación y Transferencia en Riego y Agroclimatología de la Universidad de Talca, señaló que los efectos de ese fenómeno se podrían generar un déficit cercano al 50% desde mayo a agosto.
Algo con lo que coincidió Raúl Cordero, climatólogo y experto en cambio climático de la Universidad de Santiago, quien consideró que el mayor efecto para toda la ciudadanía podría ser que la sequía ponga en riesgo la seguridad alimentaria, escaseando productos o significando un aumento en los precios.
Además sostuvo que la mayor crisis del agua está en los sectores rurales, y para eso la solución a corto plazo es la mejor gestión de las cuencas, con mayor equitatividad del recurso hídrico.
En su opinión, las únicas alternativas que existen a largo plazo es la desalinización y construcción de embalses, a pesar de que ambas tienen impactos coambientales negativos.