“Hoy puedo informar oficialmente que acabamos de soportar una década de calor mortal“, declaró esta semana Antonio Guterres, Secretario General de la ONU, para informar que el 2024 terminó siendo el décimo año consecutivo más caluroso de la Tierra desde que hay registros.
Según la Organización Meteorológica Mundal (OMM) el año pasado fue el más caluroso jamás registrado tras 10 años de un calor sin precedentes que ha sido agravado por los humanos.
El organismo apunta a que los gases de efectos invernadero han acentuado el aumento de las temperaturas en la Tierra, ya que las emisiones continúan alcanzando máximos históricos.
“Esto es un colapso climático, en tiempo real. Debemos salir de este camino a la ruina, y no tenemos tiempo que perder. En 2025, los países deben poner al mundo en un camino más seguro reduciendo drásticamente las emisiones y apoyando la transición hacia un futuro renovable”, sentenció durante su discurso de Año Nuevo el lunes.
Celeste Saulo, Secretaria General de la OMM, por su parte, expresó que “la OMM celebra su 75º aniversario en 2025 y nuestro mensaje será que, si queremos un planeta más seguro, debemos actuar ahora. Es nuestra responsabilidad. Es una responsabilidad común, una responsabilidad mundial”, planteó.
“Cada fracción de grado de calentamiento es importante y aumenta los fenómenos climáticos extremos, sus impactos y riesgos. Las temperaturas son solo una parte del panorama. El cambio climático se manifiesta ante nuestros ojos casi a diario en forma de un aumento de la incidencia y el impacto de fenómenos meteorológicos extremos”, añadió.
La OMM publicará el informe completo de las temperaturas globales y el clima global de 2024 durante enero y marzo respectivamente, pero en tanto advierten que estas alzas ya están trayendo efectos devastadores, un ejemplo de ello son los fenómenos meteorológicos extremos.
“Este año hemos sido testigos de precipitaciones e inundaciones sin precedentes y de una terrible pérdida de vidas en muchos países, lo que ha causado angustia a comunidades de todos los continentes”, continuó Saulo.
Animación de las temperaturas de la superficie de la Tierra en los últimos 24 años | NASA
“Los ciclones tropicales han causado un terrible coste humano y económico, el más reciente en el departamento francés de ultramar de Mayotte, en el océano Índico. El calor intenso ha arrasado decenas de países, con temperaturas que han superado los 50 °C en varias ocasiones. Los incendios forestales han causado devastación”, enumeró.
Durante 2025, el organismo se centrará especialmente en monitorear la criosfera, que son las partes congeladas de la Tierra, como las capas de hielo de los polos, en el marco del “Año Internacional de la Preservación de los Glaciares”.
