El delfín chileno (Cephalorhynchus eutropia), es el único cetáceo endémico del país y a la fecha se encuentra en estado Vulnerable, una clasificación que podría empeorar si no se toman medidas para proteger a esta especie.
En este contexto, el Ministerio del Medio Ambiente (MMA) inició oficialmente el procedimiento abreviado de elaboración del Plan de Recuperación, Conservación y Gestión (RECOGE) para el delfín chileno.
La propuesta del Plan RECOGE, se viene elaborando desde 2022 en un esfuerzo colectivo entre diversas instituciones públicas, académicas, científicas y de la sociedad civil, para no perder a este cetáceo, también conocido como “tonina negra”.
Quienes coordinan la iniciativa son la organización por la conservación WWF Chile, junto al MMA, Sernapesca, y la Subsecretaría de Pesca y Acuicultura (Subpesca), así como la Corporación Nacional Forestal (CONAF) y miembros de la comunidad científica nacional, de la Universidad de Chile y Universidad Andrés Bello, así como las organizaciones no gubernamentales CECEM-YaquPacha Chile y Eutropia.
Ahora, el proyecto ingresó al MMA y debe ser revisado. “En el caso del delfín chileno creemos que es crucial contar con este instrumento, ya que la colaboración y coordinación de acciones entre distintas instituciones es imprescindible si queremos conservar en forma efectiva este cetáceo, uno de los delfines más pequeños y desconocidos del mundo”, explica Yacqueline Montecinos, coordinadora de Biodiversidad Marina y Políticas Oceánicas de WWF Chile.
Además, se trata de una especie que en diversos puntos de la Patagonia tiene una alta valoración por las comunidades locales, sobre todo desde el punto de vista del turismo y la identidad cultural, por lo cual mejorar su estado de conservación también trae beneficios para las zonas en donde habita”, agrega la experta.
¿Por qué el delfín chileno es una especie Vulnerable?
De acuerdo con Sernapesca, no existe un catastro nacional de la población de toninas negras, pero se estima que existen unos pocos miles.
“La población total de delfín chileno es muy pequeña, unos cuantos miles cuando máximo. Se sugiere que la especie está escaseando, lo que es imposible de refutar sin un catastro poblacional”, dice la ficha de esta especie.
En 2023, un estudio hecho por investigadores del Centro de Investigación en Dinámica de Ecosistemas Marinos de Altas Latitudes (Centro IDEAL), de la Universidad Austral de Chile, determinó que sólo quedarían unos 2000 de estos delfines.
“Este es un número muy bajo en comparación con otras especies del mismo género”, dijo entonces el Dr. Luis Bedriñana-Romano, experto en biología de mamíferos marinos.
Si bien en Chile esta especie está categorizada como Vulnerable, en la Lista Roja de Especies Amenazadas de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN) se considera “casi amenazada”.
Según explica Ricardo Sáez Palma, jefe nacional de la Unidad de Conservación y Biodiversidad de Sernapesca, el declive de las poblaciones de delfín chileno le concierne principalmente al sector pesquero.
Esto porque la especie habita durante gran parte de su vida en un mismo lugar, siendo muy selectivo en términos de hábitat y altamente sensible a los cambios ambientales, por lo que está expuesto a diversas amenazas. Entre ellas, el enmalle en artes de pesca y las afectaciones que pueden ocasionar actividades productivas que se desarrollan en los sitios donde habitan, tales como acuicultura y salmonicultura.
Ambas actividades pesqueras abundan en los sectores donde habitan comúnmente las toninas negras. Su rango de distribución está restringido a aguas costeras frías y someras (menos de 200 metros de profundidad) del Pacífico oriental en las costas de Chile desde Valparaíso a Isla Navarino, Canal Beagle y Cabo de Hornos, hasta cerca de la entrada este del Estrecho de Magallanes.
Asimismo, hay algunas áreas de abundancia local como Playa Frailes, Valdivia, Golfo de Arauco, cerca de la Isla de Chiloé y Constitución. Se sabe que esta especie ingresa al Río Valdivia y otros ríos ocasionalmente.
“Esta especie, así como todos los cetáceos que transitan por nuestra Zona Económica Exclusiva, están bajo la protección oficial de la Ley General de Pesca y Acuicultura, por tanto, es una preocupación de la sectorialidad pesquera y acuícola de Chile”, señala Sáez.
“En específico, el poder trabajar en medidas de protección para esta especie endémica no solo irá en su directo beneficio, sino también servirá para aportar en la conservación de otras especies similares, al ser considerada una especie paraguas dentro de las iniciativas del plan, sentando bases sólidas para futuras gestiones”, agrega.
La propuesta de Plan RECOGE finalmente deberá ser vista por el Consejo de Ministros para la Sustentabilidad y el Cambio Climático (CMS), esperándose una respuesta positiva que se materialice en su aprobación oficial.