Buscando mitigar su impacto ambiental, la compañía chilena Carozzi fijó una estrategia de sostenibilidad. Entre otras intenciones, se propuso disminuir su huella de carbono. En esa línea, ha implementado una serie de medidas, tanto en sus plantas nacionales como internacionales.
Así, Carozzi estableció como meta corporativa, dentro de su concepto Compartir Hace Bien, reducir en un 50% la intensidad de sus emisiones -de alcance 1 y 2- de CO2e al año 2030 con respecto al 2016, en el total de sus operaciones de Chile, Perú y Argentina, países donde tiene sus instalaciones.
Para avanzar en la transición hacia energías limpias, se ha reemplazado parte del uso de petróleo por gas natural y usado energía eléctrica de origen renovable. Además, han ido adquiriendo equipos de climatización que utilizan gases refrigerantes con un menor impacto ambiental.
Asimismo, Juan Carlos Muñoz, subgerente de sostenibilidad de Carozzi, aseguró que “para mitigar los efectos del cambio climático y transitar a una economía baja en carbono, a la fecha, hemos logrado reducir en casi un 40% la intensidad de las emisiones”.
Con la meta de convertir su matriz energética hacia una más eficiente y limpia, entre 2016 y 2022, Carozzi logró reducir el uso de petróleo en un 85%, como resultado directo de su migración hacia el gas natural y de iniciativas de conservación y eficiencia, en las que continúan trabajando para transitar hacia energías de menor impacto con el medioambiente.
“Además, en nuestras plantas contamos con uso de energía eléctrica renovable en el 100% de las operaciones en Chile”, agregó Gómez.
Agrozzi, el brazo agroindustrial, y en 2022 lanzó su Política Energética bajo el estándar ISO 50.001, que establece un sistema de gestión energético que busca el uso eficiente de energía.
Esta política incluye la implementación de medidas de eficiencia en las instalaciones, para reducir los consumos energéticos y las emisiones de gases de efecto invernadero; la realización de capacitaciones para lograr los objetivos propuestos; y establecer criterios energéticos para la adquisición de productos y servicios.
Por otro lado, las plantas de Cereales y Pastas de Carozzi, así como su Centro Cívico, hoy cuentan con la Certificación LEED (Liderazgo en Energía y Diseño Ambiental, por sus siglas en inglés), otorgada por U.S. Green Building Council, una organización que promueve la sostenibilidad en el diseño, construcción y funcionamiento de los edificios.
En ese contexto, se reconoció su uso eficiente de energía y agua; el uso de materiales; manejo de desechos; y la calidad del ambiente interior en las edificaciones. Así, se adjudicaron el nivel de certificación LEED Gold.
De esa manera, María Victoria Hallows, Sustainability Manager de Carozzi, aseguró que proyectan “seguir fabricando y entregando los productos que millones de chilenos quieren y prefieren de manera cada vez más eficiente en el tiempo, buscando una mayor armonía con el medioambiente”.