Durante el verano, muchas familias vacacionan en los cientos de lagos y lagunas del sur de Chile. Uno de los destinos más conocidos es el lago Lanalhue, que alberga una variada oferta de actividades turísticas y un importante patrimonio cultural.

Ubicadas entre Cañete y Contulmo, se trata de una cuenca de 35 mil hectáreas, definida por la Cordillera de Nahuelbuta. En este sector se pueden avistar especies que sólo habitan en esta región montañosa, por lo que se ha convertido en un refugio para la flora y fauna nativa.

Bajo este contexto y considerando una masiva afluencia de personas, la Seremi de Medioambiente del Bí Bío y el Programa de Restauración de los Servicios Ambientales de los Ecosistemas Lacustres de la Provincia de Arauco (Prela) hicieron un llamado para incentivar el cuidado y protección de lagos y lagunas.

Mario Delannays, Seremi del Medio Ambiente de la región del Bío Bío, mencionó: “Invitamos a todos a sumarse a la conservación de nuestros paisajes. Si visitan el lago, que nos ayuden a cuidarlo. Si van a estar en un camping, que eviten dejar la basura en cualquier parte”.

“Llevamos cinco años mejorando la salud del Lago Lanalhue junto a los habitantes de la cuenca, a través de variadas acciones de restauración. La comunidad local está organizada para proteger la zona, así que hacemos un llamado a que sigamos trabajando juntos para cuidar nuestros lagos”, agregó la autoridad regional.

Con el objetivo de recuperar los espacios naturales y el apoyo de la comunidad, se han plantado 40 mil especies de árboles nativos en la cuenta del lago. Sumado a la instalación de baños ecológicos para evitar que los desechos llegan al ambiente y el uso del agua lluvia para la agricultura del lugar.

Restauración a escala de paisaje

Como la conservación del paisaje resulta clave para las distintas actividades económicas, en especial para la actividad turística, Prela ha ejecutado una serie de estudios y monitoreos, que permiten tomar mejores decisiones sobre la actividad forestal, ganadera y agrícola.

“Como programa, hemos desarrollado diversos estudios científicos, necesarios para justificar la solicitud de una norma secundaria de calidad ambiental, instrumento regulatorio, que permitirá fijar los límites máximos que puede tener el lago para algunos parámetros. Por ejemplo, nitrógeno, fósforo y clorofila”, destacó Pamela Cuevas, coordinadora de Prela.

Para complementar el conocimiento, además del valor natural y cultural de toda la cuenca, se realizó un censo y monitoreo de aves acuáticas, donde se registraron 46 especies, las cuales habitan en los distintos tipos de humedales de Lanalhue.

Dicha avifauna no debiera ser invadida o maltratada, cuidando así que puedan desarrollar su ciclo reproductivo en los distintos humedales del borde del lago. Cabe mencionar que estos ecosistemas constituyen una ruta continental para miles de aves que migran desde el hemisferio norte hacia el sur.

Participación territorial

La protección de estos cuerpos de agua tiene que partir desde los propios territorios. En esta línea, Pamela Cuevas, valoró la participación de la comunidad local en este tipo de intervenciones.

“Prela tiene un origen ciudadano. Nuestro programa de restauración impulsa la participación territorial, a través de la Mesa de Gobernanza, espacio de toma de decisiones y acuerdos socio ambientales a nivel local”, señaló la coordinadora.

La iniciativa nació con el objetivo de conocer en detalle el estado de salud del lago Lanalhue e implementar acciones que reviertan su acelerado deterioro y promover soluciones basadas en la naturaleza.

Tras la realización de un estudio limnológico- rama que estudia los ecosistemas acuáticos continentales-, los resultados determinaron que hoy el lago se encuentra en una categoría “mesotrófica”, es decir, cuenta con una alta concentración de nutrientes, fósforo y nitrógeno, producto de las diversas actividades humanas que se desarrollan en torno a él.

Estos nutrientes, en grande porcentajes, rompen el equilibrio ecológico y disminuyen la calidad del agua, categorizando al lago en una etapa intermedia y con un estado de salud regular. Prela ha trabajado en la protección y restauración de la cuenca hidrográfica, generando un método y una mesa de gobernanza que podrían ser imitada en otras latitudes.

Prela ha trabajado en la protección y restauración de la cuenca hidrográfica, generando un método y una mesa de gobernanza que podrían ser imitada en otras latitudes.