Una situación hídrica extrema están viviendo más de mil vecinos de zonas rurales de Santa Juana -región del Bío Bío-, y que tienen que subsistir con apenas 50 litros de agua diariamente entregados por camiones aljibes.
Tras solicitar ayuda al gobernador regional, Rodrigo Díaz comprometió gestiones propias, con la Corporación Chilena de la Madera (Corma) y el Ministerio de Agricultura.
Hasta la sede del Gobierno Regional llegó la alcaldesa de Santa Juana, Ana Albornoz, y un medio centenar de vecinos para solicitar la intervención del gobernador Rodrigo Díaz.
Y es que, como informó la jefa comunal, ni la Delegación Presidencial ni la Seremi de Agricultura han respondido los oficios enviados desde el municipio sobre la insuficiente entrega de 50 litros de agua que hace la Onemi, ni tampoco sobre la ayuda que debería llegar para enfrentar la escasez hídrica.
Tu navegador no soporta audio en HTML5
Son dramáticos los relatos escuchados y que dan cuenta de cómo vive la gente con el agua que entregan los camiones aljibes, y que debe dividirse entre las personas, los animales y la agricultura.
Incluso, subrayó el dirigente vecinal Santiago Quezada, aunque es difícil de creer, hay familias desesperadas que se ven obligadas a utilizar agua no apta para el consumo humano.
Tu navegador no soporta audio en HTML5
Tras conversar con la alcaldesa Albornoz y los habitantes de Santa Juana, el gobernador Díaz comprometió tres medidas que podrían paliar en el corto plazo la crisis.
“Gestionamos una reunión con la gente de la Corma para que el programa que ellos tienen de apoyo para que exista agua para consumo humano, se materialice con foco en Santa Juana. Voy a tomar contacto con la ministra de Agricultura para pedirle que las medidas de apoyo de agua para los animales y abastecer los cultivos, puedan ser reenfocados. Tercero, voy a proponer que reflotemos el fondo social del agua”, aseguró.
Tu navegador no soporta audio en HTML5
Son 1098 vecinos de sectores rurales quienes sufren la escasez de agua, recibiendo sólo la mitad de los 100 litros que la Corte Suprema determinó como lo mínimo para que una persona pueda vivir y por eso el llamado de la alcaldesa de Santa Juana a las autoridades.