Siguen los esfuerzos por ayudar a “Kevin”, el lobo de mar que tiene el cuello cercenado por un nylon, en Ancud.
Se trata de una situación que preocupa a la comunidad, y a quienes diariamente pasan por el sector en que se encuentra el mamífero, cuya herida es apreciable a simple vista.
Por lo mismo, diversas gestiones se han realizado para poder capturarlo y rehabilitarlo, sin embargo, su tamaño y peso, además del complejo lugar donde se ubica, han dificultado el proceso.
El presidente de la ONG Chiloé Silvestre, Javier Cabello, comentó que dormir al animal con un dardo, como han planteado muchas personas, pone en riesgo la integridad del lobo marino.
El director regional subrogante de Sernapeca, Branny Montecinos, dijo que esperan tener novedades positivas durante los próximos días.
De acuerdo al doctor Cabello, pese a las heridas de “Kevin” se encuentra en buenas condiciones y se alimenta bien, lo que prevé buenas posibilidades para su recuperación.
