Científicos del Museo de Historia Nacional del Reino Unido identificaron 503 especies de animales desconocidas hasta hoy. Debido a la crisis global medioambiental, se ha producido una rápida disminución de la biodiversidad a lo largo del planeta. Por este motivo, el doctor Tim Littlewood, director ejecutivo de ciencia en el museo, alertó en un artículo que identificar nuevas especies conlleva una limitación temporal. El tiempo para hacerlo se está acabando.

Según los hallazgos publicados en un informe de las Naciones Unidas, desde 1990 la abundancia de especies nativas ha disminuido en un 20%. Esta información también revela que “aún no es muy tarde para hacer una diferencia, pero sólo si comenzamos inmediatamente tanto localmente como globalmente” declaró el químico Sir Robert Watson, presidente de la Plataforma Intergubernamental sobre Diversidad Biológica y Servicios de los Ecosistemas (IPBES, en inglés).

El descubrimiento de estas cientos de especies ha sido un arduo trabajo para los científicos, que durante el 2020 se dedicaron completamente a investigarlos y compartir sus descubrimientos en la comunidad científica; ya que el museo estaba cerrado. Cuando se descubre una nueva especie, el trabajo es intenso: hay que describirla, recopilar información y detalles sobre cómo funciona su organismo, cómo se desarrollan en su hábitat y sus particularidades. Todo esto debe presentarse en un artículo como investigación, para luego ser presentada en la comunidad científica para que la revise, como explicó a CNN Ken Norris, jefe de ciencias de la vida en el Museo de Historia Natural.

Tim Littlewood está de acuerdo: “descubrir especies nuevas y no descritas no sólo mantiene nuestro asombro por el mundo natural, sino que también revela lo que podemos perder. Esto es un impulso para estimar y apreciar la diversidad de nuestro planeta, que podríamos perder incluso antes de conocerla. Nuestra comprensión del mundo natural es insignificante, y sin embargo, dependemos de sus sistemas, la interconexión y la complejidad que tienen los alimentos, las aguas, la resiliencia climática y el aire que respiramos” declaró en el artículo del museo.

Las criaturas descubiertas van desde polillas, animales acuáticos, mamíferos como monos, escarabajos, serpientes e incluso algas. No sólo son animales, sino que también hay nuevos minerales, como uno llamado kernowite, un tipo de esmeralda que sólo se ha visto en un sólo lugar: una vieja mina en Cornualles (Cornwall), un condado en Inglaterra. En total, hay diez nuevas especies de minerales descubiertos en todo el mundo: desde California, hasta Rusia.

Mike Rumsay, el curador principal de minerales del museo británico explica que “cada año se describen entre 10 y 120 minerales nuevos alrededor del mundo”. Sin embargo, está sorprendido ya que es muy raro encontrar en el Reino Unido. “Esto pasa sólo cada tres o cuatro años” declaró.

Dentro de los nuevos insectos, los expertos de museo identificaron 70 nuevas especies de avispa. 15 de ellas están en los bosques andinos nublados y la selva amazónica de Brasil. En Mongolia, se se descubrió un nuevo tipo de abeja, la bombas tibeticus, un tipo de abejorro, que está entre las especies de anthophila que están a mayor altura: en la meseta tibetana a 5.640 metros sobre el nivel del mar.

Uno de las criaturas más llamativas es un polilla verde esmeralda encontrada en el archipiélago de Bismarck, en Nueva Guinea. Bautizada como pachytrix chlorophylla, su intenso colorido y diseño en sus alas ha llamado la atención. Dentro de los 503 descubrimientos, la gran mayoría son invertebrados. Sólo hablando de escarabajos, se descubrieron 170 especies, que ya fueron bautizadas y encontradas en todas partes del mundo, como Brasil, y un diminuto escarabajo que vive en los pantanos de Malawi.

También está la salamandra gusano Oedipina ecuatoriana, una de cuyas capacidades más curiosas es la de respirar a través de la piel ya que carece de pulmones. Este anfibio vive enterrándose él mismo en el suave suelo de los bosques tropicales de Sudamérica, donde habita.

Otro de los destacados ha sido una nueva especie de monos, que se encontró en un volcán extinto en Myanmar. El prímate, bautizado como Popa Langur, se estima que ha existido desde al menos un millón de años. El nombre está relacionado al Monte Popa, lugar sagrado construido en la cima del antiguo volcán. Lamentablemente, ya se considera que esta especie está en un crítico peligro de extinción, con tan sólo entre 200 y 260 individuos restantes en su hábitat natural.

Una serie de anfibios y reptiles también fue estudiado, con lagartijas, dos especies de ranas y nueve de serpientes, incluyendo la víbora trimeresurus davidi. Una serpiente verde, en la isla de Car Nicobar, del archipiélago de Nicobar en el Océano Índico. Esta especie es endémica de la zona, y ya es considerada una especie en peligro de extinción debido a que su área de distribución es limitada.

Roberto Portela Miguez, el curador principal a cargo de los mamíferos en el museo y parte del equipo en la identificación de nuevas especies, espera que bautizar las especies tenga un impacto positivo en su conservación. “Esperamos que al darle a estas nuevas especies el estatus científico y la notoriedad que merecen, se realizarán más esfuerzos para proteger sus áreas y las pocas poblaciones restantes” declaró al museo.