Las restricciones derivadas de la pandemia de covid-19 provocaron una caída inédita de las emisiones de CO2 en el primer semestre de 2020.
Aquello es incluso superior a las registradas durante la crisis financiera de 2008 y la Segunda Guerra Mundial, indicó este miércoles un grupo internacional de investigadores.
El confinamiento provocó un retroceso drástico de las emisiones relacionadas con los transportes, la aviación y la energía según este equipo que publicó su estudio en la revista Nature Communications.
En concreto, las emisiones de CO2 derivadas del transporte se redujeron un 40%, las de la producción de energía un 22% y las de la industria un 17%.
Las vinculadas con la vivienda declinaron un 3%, pese al teletrabajo masivo. Los investigadores atribuyeron esta bajada a un invierno boreal anormalmente suave que limitó la necesidad de poner la calefacción.
Estas cifras se obtuvieron tras analizar datos de la producción eléctrica, del tráfico vial en más de 400 ciudades del mundo, del número de vuelos y también sobre producción y consumo.
No obstante, también apuntaron que las emisiones volvieron a escalar a sus niveles habituales en julio de 2020, cuando una gran cantidad de países levantó las restricciones.
“Aunque la caída de las emisiones de CO2 es sin precedentes, la respuesta [a largo plazo] no puede ser la reducción de las actividades humanas”, indicó el coautor del estudio Hans Joachim Schellnhuber, del Potsdam Institute for Climate Impact Research (PIK). “Necesitamos cambios estructurales y de transformación de nuestros sistemas de producción de energía y de consumo”.
El Acuerdo de París de 2015 prevé limitar el alza de la temperatura global por debajo de 2° C e incluso a 1,5° C, comparado con el periodo preindustrial.
Para cumplir este objetivo habría que reducir las emisiones de gases de efecto invernadero de 7,6% anual entre 2020 y 2030, según la ONU.