Día del reciclaje: residuos electrónicos contaminarán planeta por hasta mil años tras su vida útil

Este domingo 17 de mayo se celebra a nivel internacional el Día del Reciclaje, motivo por el cual la Fundación Chilenter, dedicada a la reutilización o reacondicionamiento de productos electrónicos, resaltó la importancia de esta práctica con fines medioambientales.

A través de un comunicado, y citando investigaciones realizadas en la materia, la institución afirmó que reciclar ese tipo de productos termina siendo un alivio para nuestro planeta, en un tiempo en el cual además de crisis sanitaria por el nuevo coronavirus los efectos del cambio climático no dan tregua.

“Voy a dejar un ejemplo para llamar a la reflexión: un residuo tarda en degradarse 1.000 años según algunos estudios, comparados con los 10 o 15 años como máximo que lo utilizamos. Estamos hablando que se mantiene en el planeta contaminando 100 veces (o más) de lo que lo utilizamos. El cambio debe comenzar por nosotros”, escribió Gonzalo Lagos, director ejecutivo de la entidad.

La fundación lleva 17 años en este rubro y, según su declaración, en este tiempo han puesto en práctica “varios objetivos de los 17 planteados por la Organización de las Naciones Unidas para cumplir con el desarrollo sostenible”.

Es por ello que ponen énfasis en el reciclaje y reacondicionamiento de electrónicos, actividad que ha tomado notoriedad en los últimos años y que se va a ver intensificada gracias a la puesta en marcha de la Ley de Fomento al Reciclaje (Ley REP) con el rubro de los electrónicos.

A través del escrito aseguraron que en 2019 recibieron “casi 220 toneladas de residuos electrónicos, de los cuales un 49% pasó a las líneas de reacondicionamiento (reutilización en la jerarquía de gestión de residuos)”.

Un 42% de todo aquello fue reciclado y tan solo un 9% fue eliminado en rellenos sanitarios, indicaron.

Al mismo tiempo, detallaron que un 66% de los componentes electrónicos computacionales que ingresaron a Chilenter durante el último año procedieron de instituciones privadas, un 32% de reparticiones públicas y un 2% de personas naturales que se acercaron a la fundación a traer sus equipos.

“Lo que queremos decir con esto es que el mensaje se está entendiendo. Tanto reutilizar como reciclaje con nosotros se traduce en disminución de huella de carbono (HDC)”, valoraron.

Chile número uno en desechos

Pero el contexto actual del reciclaje electrónico en el país es motivo de preocupación para la organización, ya que Chile es número uno en la región, pero por motivos que no generan alegría.

“Son preocupantes las cifras que tenemos hoy en día en el país. Según el último estudio regional de la ONU, indicaron que en 2018 cada chileno generó alrededor de 11 kilos de residuos electrónicos, pasando a liderar la estadística en la región en generación de desechos electrónicos por persona”, detallaron.

Eso se suma a datos del Ministerio de Medio Ambiente que indican que el 81% de los residuos electrónicos tiene destino desconocido y que el 19% restante son enviados a rellenos sanitarios, junto a residuos domésticos que también se disponen en vertederos.

Pese a todo lo anterior, desde Chilenter se mantienen positivos al respecto y afirman que todavía se pueden desarrollar estrategias de desarrollo sostenible.

“Para esto hay que contar con voluntad, políticas empresariales concretas y apoyo gubernamental como el que está desarrollando el Ministerio del Medio Ambiente con la aplicación escalonada de la Ley REP”, complementó Lagos.

“Sabemos que esta es, y citamos a autoridades del Ministerio de Salud, la crisis más dura que nos ha tocado vivir durante las últimas décadas, pero estamos seguros que podemos convertirla en una oportunidad para desarrollar estrategias de desarrollo sostenible que terminarán potenciando nuestra economía, además de reducir en un número significativo nuestra generación de todo tipo de desechos y basura”, dijo Lagos.

A su juicio, facilitar, crear, fomentar y desarrollar oportunidades de crecimiento es fundamental en la economía actual tanto para nuestro país como para el resto del mundo; “pero a diferencia del contexto que existía hace 30 años, ahora hay un nuevo objetivo en el horizonte: el desarrollo sostenible y sustentable para alcanzar distintos fines minimizando los daños que se pueden generar al medio ambiente”, señaló.

“La globalización, industrialización y crecimiento poblacional lamentablemente han traído un problema severo a lo que todos estamos expuestos. Es un problema que vivimos a diario (y) se traduce en un simple enunciado: calentamiento global. Cuyas consecuencias, a largo plazo, podrían ser mortales e irreversibles”, aseveró.

Es por ello que el ejecutivo señaló creer que es posible desarrollar un sistema que una tres variables fundamentales, como lo son el progreso social, el equilibrio medioambiental y el crecimiento económico.