Candidaturas de derecha meten presión al oficialismo de cara a la carrera presidencial

Las candidaturas presidenciales que ha oficializado la derecha y su popularidad en las encuestas de opinión han generado cierta presión al oficialismo, donde aún no se define a quiénes competirán en la carrera por llegar a La Moneda.

De hecho, a casi diez meses de las elecciones, en la alianza de gobierno, el único candidato confirmado es el diputado del Partido Liberal, Vlado Mirosevic. Sumado a ello, en los sondeos de opinión, los liderazgos del oficialismo que se asoman entre las preferencias presidenciales son figuras políticas que -por ahora- han descartado participar en dicha elección.

La presión en el oficialismo por carrera presidencial

Frente a este escenario, en la interna del sector crece la presión por posicionar nombres. En ese sentido, el presidente del Partido Comunista, Lautaro Carmona, sostuvo que “mientras más pronto alcancemos una expresión de amplia unidad y eso se represente en prioridades, desde el punto de vista programático y sean, obviamente, coherentes con hasta donde estamos llegando, es más factible asimilar bien el ingreso de liderazgos con retraso respecto a la derecha”.

Algunos de los nombres que han surgido son la presidenta del Partido Socialista, la senadora Paulina Vodanovic, la ministra del Interior, Carolina Tohá (PPD); el alcalde de Maipú, Tomás Vodanovic (FA); el diputado Gonzalo Winter (FA); y la embajadora en México, Beatriz Sánchez. Sin embargo, ninguno ha sido oficializado.

En medio de este contexto, la presidenta del Frente Amplio, Constanza Martínez, señaló que, “a veces, uno olvida los procesos anteriores. En la elección pasada, los candidatos que eran evidentes eran (Daniel) Jadue y (Joaquín) Lavin, y luego todo eso cambio, porque creo que lo importante es ofrecer una lectura de país y a ratos hay mucha ansiedad de nombres y poca ansiedad de proyectos. En eso estamos trabajando, al menos como Frente Amplio”.

Cabe mencionar que son varios los partidos que apuntan a marzo como el mes clave para las definiciones presidenciales.