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La defensa del exsubsecretario del Interior, Manuel Monsalve, se encuentra luchando contra el tiempo para solicitar su liberación, mediante la revocación de su prisión preventiva, tras ser formalizado por delitos de violación y abuso sexual. Deberán presentar un recurso de apelación ante la Corte de Apelaciones de Santiago, mientras la exautoridad permanece tras las rejas en el Complejo Penitenciario de Rancagua. La estrategia de la defensa incluiría cuestionamientos sobre la existencia del delito, la falta de pruebas y una supuesta relación afectiva previa entre el imputado y la víctima. Mientras tanto, Monsalve comparte celda con otros dos internos en el módulo 86, destinado a acusados primerizos de delitos sexuales, en un contexto en que se han evidenciado problemas de seguridad en la cárcel de Rancagua.
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La defensa del exsubsecretario del Interior, Manuel Monsalve, se encuentra trabajando contra el tiempo para solicitar su liberación, a través de la revocación de su prisión preventiva.
El reloj ya empezó a correr y el tiempo se extenderá hasta el próximo, fecha en la que los abogados del exzar de la seguridad deberán ingresar, a través del Séptimo Juzgado de Garantía de Santiago, un recurso de apelación que será elevado a la Corte de Apelaciones de Santiago, tribunal que tendrá la última palabra sobre el futuro procesal de Monsalve.
En tanto, la exutoridad de gobierno pasó su segunda noche tras las rejas, luego de haber ingresado al Complejo Penitenciario de Rancagua durante la madrugada del pasado miércoles. Lo anterior, después de que el juez Mario Cayul decretara su prisión preventiva al considerarlo un peligro para la sociedad tras ser formalizado por delitos de violación y abuso sexual, ambos consumados.
En ese sentido, considerando aprovechar al máximo los cinco días que les quedan, la defensa del exmilitante del Partido Socialista ya comenzó a preparar el escrito con el que solicitarán la revocación de la medida cautelar más gravosa.
De esta manera, se espera que los lineamientos de la estrategia sean similares a los ya fueron expuestos ante el tribunal de garantía, como los nulos recuerdos que dicen tener, tanto el imputado como la víctima, tras beber los piscos sour, o la supuesta relación entre el exsubsecretario y la denunciante, que la defensa de Monsalve calificó como “pareja en formación”, lo que fue intentado de demostrar a través de pantallazos de conversaciones entre ambos.
Otra arma legal que podría emplear la representación de Monsalve son las propias críticas y emplazamientos que hizo el magistrado Cayul al Ministerio Público y a la parte querellante respecto a la falta de fundamentos para invocar las causales de peligro para la seguridad de la víctima y de la investigación.
La posible estrategia y los argumentos del juez
Frente a este escenario, el abogado penalista del Estudio CADIZ, Diego Izquierdo, sostuvo que, “si ante la Corte de Apelaciones (la defensa) sigue con la teoría de caso que hasta ahora se le ha conocido, es probable que en su alegato la defensa cuestione la existencia del delito, fundándose en la falta de pruebas suficientes y en una supuesta relación afectiva previa entre la víctima y el imputado”.
Además, agregó que “es posible que representen las dificultades que hasta ahora han alegado haber tenido, en relación con contar con los antecedentes de la carpeta de investigación para ejercer adecuadamente su derecho a defensa”.
En tanto, la abogada experta en delitos sexuales, Eva Guerrero, planteó que “si bien el tribunal estimó que no estaba suficientemente acreditado un peligro para la seguridad de la víctima, o un peligro para la investigación, lo cierto es que, de todas formas, estima que la pena asignada al delito, la gravedad de la conducta, número de hechos por los cuales la persona está siendo investigada (…) Cumpliéndose estas circunstancias, se debería considerar, entonces, que la libertad del señor Monsalve constituye un peligro para la seguridad de la sociedad”.
Asimismo, el académico y director del Departamento de Derecho Público de la Usach, Luis Bobadilla, destacó que “el punto más importante es que el magistrado consideró que, en base a la gravedad de las penas, en base a la escala penal y a la naturaleza de los delitos investigados, la violación es la conducta más grave en contra de la libertad sexual de la mujer”.
“Por eso invocó, además de las normas del Código Procesal Penal, la convención interamericana para erradicar la violencia en contra de la mujer”, agregó.
Los días de Monsalve en la cárcel de Rancagua
Por otra parte, luego de las dos jornadas de formalización, el exsubsecretario de Interior fue derivado al módulo 86 de la cárcel de Rancagua, destinado a imputados primerizos acusados de delitos sexuales.
Se trata de un módulo donde conviven unos 70 reclusos y donde se encuentran algunas personalidades como exfuncionarios de la policía y de las Fuerzas Armadas, así como el exalcalde de Rancagua, Juan Ramón Godoy.
El miembro de Gendarmería y dirigente de Anfup, Cesar Guzmán, aseguró que “el interno Monsalve es una persona que luchó contra el crimen organizado y en esta cárcel tenemos un porcentaje no menor de internos que pertenecen al crimen organizado”.
En la misma línea, argumentó que “para nosotros es un problema, porque no tenemos el personal adecuado para tenerlo en custodia directa”.
También, el sindicalista señaló que “la empresa Siges, que es la empresa que está a cargo de mantener o reparar los daños de la cárcel, no está dando cumplimiento, ya que la semana pasada tuvimos un evento, una fuga”.
“Hubo un interno que estuvo más de tres horas en el exterior. Logró fugarse y abrieron la celda con una cuchara. Entonces, cuando a nosotros nos hablan de mandar este tipo de interno o hablan de la cárcel de Rancagua como una cárcel de alta seguridad, les puedo decir que la semana pasada fuimos vulnerados por una cuchara”, continuó.
Así, el exzar de la seguridad comparte la celda número 44 con otros dos internos. Uno corresponde a un ex carabinero encausado por delitos sexuales y el otro es un recluso imputado por conducción en estado de ebriedad.