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En medio de la presión de sectores de la oposición tras el anuncio de un veto presidencial al proyecto de elecciones en dos días, el gobierno busca reponer la multa por no sufragar y disminuir el financiamiento a los partidos por cada voto obtenido, con la particularidad de que la multa sería solo para ciudadanos chilenos, dejando fuera a electores extranjeros avecindados en el país. El ministro Secretario General, Álvaro Elizalde, defendió la medida argumentando que el voto es una obligación constitucional exclusiva de los ciudadanos chilenos. Por otro lado, desde la oposición, el senador Matías Walker del Partido Demócrata enfatizó la necesidad de mantener el voto obligatorio para todos los electores con domicilio en Chile, sin aceptar "maniobras electorales a última hora". En paralelo, un grupo de parlamentarios del oficialismo presentó un proyecto para eliminar el derecho al voto de extranjeros avecindados en Chile en elecciones parlamentarias, presidenciales y regionales, argumentando la necesidad de evitar distorsiones electorales.
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Todo esto, después que la Sala del Senado rechazara el informe emanado de la Comisión Mixta. Así, el gobierno busca reponer la multa por no sufragar y disminuir el financiamiento a los partidos por cada voto obtenido. Pero, pretenden que dicha multa sea sólo para los ciudadanos chilenos y no para los electores extranjeros avecindados en el país.
Sectores de la oposición presionan al Ejecutivo, luego que este anunciara un veto presidencial al proyecto de elecciones en dos días. De esta manera, se agudizan las especulaciones sobre los cálculos políticos que realizan las diferentes coaliciones políticas, en cuanto a que situación los beneficiaría más.
Todo esto, después que la Sala del Senado rechazara el informe emanado de la Comisión Mixta. Así, el gobierno busca reponer la multa por no sufragar y disminuir el financiamiento a los partidos por cada voto obtenido. Pero, pretenden que dicha multa sea sólo para los ciudadanos chilenos y no para los electores extranjeros avecindados en el país.
El ministro Secretario General, Álvaro Elizalde, argumentó que es un “veto para establecer una sanción a los ciudadanos que no cumplan con la obligación constitucional de participar en las elecciones. Para ser ciudadano hay que ser chileno”.
Frente a esta acción, desde la oposición, el senador Matías Walker (Demócratas) espera “que ese veto se apruebe. Vamos a insistir que es necesario ratificar la misma redacción que en los últimos procesos constituyentes, que el voto es obligatorio para todo elector con domicilio en nuestro país. No vamos a aceptar maniobras electorales a última hora”.
En la misma línea, la jefa de bancada de Renovación Nacional, la diputada Ximena Ossandón planteó que “el veto también es complicado, por eso insistimos en el liderazgo del Presidente de la República, porque tiene que llegar a un quorum que aquí, en la Cámara, es más fácil de llegar, pero claramente en el Senado él va a tener que demostrar su liderazgo”.
Suprimir el derecho al voto de los extranjeros avecindados
Por su parte, un grupo de parlamentarios del oficialismo presentaron un proyecto de ley para suprimir el derecho al voto de los extranjeros avecindados en Chile en elecciones parlamentarias, presidenciales y regionales.
La iniciativa, que tiene su origen en los socialistas Daniel Manouchehri, Daniella Cicardini y Daniel Melo, pone en la discusión sobre la mesa, en medio del debate por las elecciones en dos días.
El senador Gastón Saavedra (PS) planteó que “se requiere dar paso a eso, para evitar, además, distorsiones que pudieran darse desde el punto de vista electoral, porque más de un sector político pretende darle un carácter utilitario a la presencia de los extranjeros en el país”.
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