Con avances, algunas críticas y el Partido Republicano abandonando la mesa de trabajo, terminó una nueva reunión entre colectividades, en busca de un acuerdo constitucional.
En el oficialismo acusaron intransigencia de Chile Vamos, mientras que la derecha sostuvo que en la coalición de Gobierno existe una versión en la interna y otra frente a los medios de comunicación.
Mientras el oficialismo acusa intransigencia y aprovechamiento de Chile Vamos con el resultado del plebiscito del 4 de septiembre, en la derecha sostienen que hay dirigentes que prefieren estar en los puntos de prensa que en las reuniones.
Con ese ánimo terminó una nueva reunión entre colectividades que pareció alejar posturas, más que acercarlas, que era el principal objetivo.
Sabiendo que la discusión actual se está dando respecto de los “bordes” o límites del nuevo proceso, temas como la extensión del derecho de propiedad, la plurinacionalidad y los derechos de aprovechamiento del agua, son las principales trabas actualmente en las negociaciones.
En el oficialismo dicen que ellos han cedido en las conversaciones, en asuntos como el Estado unitario, la independencia de los poderes del Estado y el resguardo del himno y los emblemas patrios, entre otros; y acusan que Chile Vamos no hace lo mismo respecto de los temas ya descritos.
Así lo afirmó el diputado independiente de la bancada Radical-Liberal, Tomás Lagomarsino.
En Chile Vamos indicaron que sí existen avances importantes e incluso que los acuerdos en cuanto a los principios institucionales llegan al 80%.
Por eso, el senador y presidente de Renovación Nacional, Francisco Chahuán, sostuvo que algunos miembros del oficialismo dicen una cosa en la interna y otra totalmente distinta frente a los medios de comunicación.
A pesar de todas estas declaraciones cruzadas, el presidente del Senado, Álvaro Elizalde, realizó un balance positivo respecto de la reunión de ayer y lo propio hizo la ministra de la Segpres, Ana Lya Uriarte.
Hablando de complicaciones para llegar a acuerdos, el Partido Republicano decidió -como era previsible- restarse de las mesas de conversación, por las profundas diferencias que tienen con las demás colectividades.
Su objetivo principal es que el Congreso sea el protagonista de las reformas a la actual Constitución, desechando de plano la posibilidad de un nuevo órgano redactor, algo que no tiene piso actualmente en las negociaciones.
El Partido de la Gente también presenta discrepancias, principalmente con la idea de un plebiscito de entrada, pero se mantendrá en esta instancia formal de conversación.
Así confirmaron sus decisiones la presidenta del Partido Republicano, Ruth Hurtado, y Emilio Peña, secretario general del Partido de la Gente.
Esta jornada se desarrollará una nueva reunión bilateral entre Chile Vamos y el oficialismo junto a la DC, que buscará, por un lado, limar asperezas y por otro, seguir en el trabajo de acercar posturas.