La otrora personalidad televisiva y ahora diputada presentó un proyecto para legalizar la prostitución creando un barrio como los que existen en Países Bajos y de esta forma, regular la prostitución en los barrios. Asegura que las trabajadoras sexuales han sufrido mucho con esta pandemia y se les debe asegurar un espacio digno.
“Hay varios factores que se fueron acumulando para que yo despertara, y pensé en las cosas que me han dichos las personas del Barrio Bustamante que incluye mi distrito y he recogido su preocupación porque no pueden sacar a pasear a los niños porque recién entrada la tarde, empieza el comercio sexual. Los tiempos están para que le demos una formalidad al comercio sexual”.
Respecto al lugar donde podría estar emplazado este barrio, la Diputada Independiente propone dos opciones: que los vecinos decidan mediante votación popular si están de acuerdo en formalizar la iniciativa en su barrios o crear un distrito en las afueras de Santiago.
“Hay muchos lugares donde podría estar, pero el lugar donde se escoja debería existir un plebiscito para que ocurra y si existe una negativa podría estar emplazado en un barrio más industrial en las afueras de Santiago”
“El Barrio Rojo tiene que darle una vida digna a las personas que ejercen este oficio y también a los clientes ¿Por qué darle espacio a las salmoneras y a las mineras para que destruyan nuestro país? Este barrio sería algo inclusivo” afirma para el programa “Podría Ser Peor”.
Pero también ha sido su propia experiencia como profesional de la salud la que la ha llevado a presentar una iniciativa como esta. Asegura que en los años cuando comenzó su carrera, el país se encontraba mejor preparado para dar dignidad a las trabajadoras sexuales.
“La primera paciente que tuve en un consultorio de Renca que ejercía el comercio sexual, me contó sobre su experiencia, que fue en los años 60 cuando éramos un país pobretón con cierta discreción y con centros de control de enfermedades venéreas; curiosamente más civilizado que ahora”
“Cuando era chica e íbamos a bañarnos a la playa cerca de Puerto Montt y mi mamá me dijo que cerca de ahí estaban las “casas de tolerancia”,, en la calle Rosselot. Para ese entonces ya había barrio rojo, en 1950″.
“No tratamos el tema de forma abierta es que las características del chileno es la hipocresía de parecer lo que no somos, tenemos un trastorno de personalidad que se llama “As If”: como si fuéramos abiertos de mente, y somos todo lo contrario” critica respecto a la actitud de nuestro idiosincrasia.
Ante la disyuntiva de un auditor que le preguntó si no tendría problemas en que el barrio rojo fuese puesto cerca de su casa, María Luisa Cordero respondió:
¿Por qué no poner este tipo de barrio al lado de mi casa? No tendría problemas. Si está limpio, y si hay conducta adulta y madurez”.
Respecto al Plan de Salud Universal, la entrevistada asegura que el pase de movilidad entre otras medidas corresponden a un “comisariato cubano”.
“Es imposible que exista un sistema único de salud ¿Dónde está la libertad de atenderme con alguien sin esperar 8 horas y exigirle al médico que deje de tomar café escondidas?”
“La Ministra de Salud es un fantasma como los ministros de Piñera; que se informe mejor, ella es pediatra y Ministra de Salud, no cuesta nada que pregunte a los especialistas (Respecto al cierre del hospital de El Salvador que cerró pese a críticas de Colmed).